CASTELLÓ. El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castelló ha expresado su “apoyo” a los vecinos que residen en el entorno de la plaza Isabel la Católica de la capital, ante las quejas que estos han elevado al consistorio por las molestias que padecen en dicho enclave y ante la “pasividad” de la alcaldesa, Amparo Marco, y de su equipo de concejales.
El concejal y representante del PP en la Junta de Distrito Norte, Juan Carlos Redondo, así como el concejal Popular Vicent Sales, que tiene vínculos familiares con este barrio, se han reunido con residentes de la zona para conocer más detalles sobre esta problemática y tratar de buscar soluciones.
“Los vecinos están cansados de que colectivos de extrema izquierda, como los relacionados con ‘La Cosa Nostra’ y entidades afines, hayan tomado literalmente la plaza como si fuese propia para celebrar de manera habitual actividades que ellos denominan culturales y amenacen a los residentes cuando éstos se quejan de que se producen incumplimientos flagrantes de normativas sanitarias, relativas a ruidos o de las propias ordenanzas de convivencia ciudadana y de salud pública sin que nadie tome medidas al respecto”, han expuesto los populares.
En consecuencia, Redondo ha pedido a Marco que “en aras de la transparencia de la que tanto presume, habilite un tablón de anuncios, físico o virtual, que permita a los vecinos conocer con certeza cada día qué actividades cuentan con autorización de ocupación de vía pública, de modo que sea posible saber en qué condiciones y de qué tipo de permiso disponen los actos que se organizan en una fecha determinada”. Y es que, según ha asegurado el edil, “tal y como hemos denunciado en comisiones, en el caso de esta plaza ha habido actos que se han celebrado sin permiso, como una serie de conciertos que tuvieron lugar el pasado mes de septiembre, o cuyo permiso se ha formalizado mucho más tarde, e incluso hemos pedido información sobre la presunta ocupación de las instalaciones de lo que antiguamente era un bar y que ahora estos colectivos utilizan como un local más”.
El concejal del Grupo Municipal Popular asevera que “se trata de un problema que viene de lejos y, una de las principales pruebas, es tanto el mural ubicado en esta plaza como todos los elementos urbanos situados en este enclave, que son constantemente objeto de pintadas con mensajes nacionalistas, independentistas o de extrema izquierda”. “Parece que los servicios municipales lo limpian para que ellos puedan renovar sus mensajes, como si fueran escaparates”, ha agregado el edil.
Al respecto, ha pedido al equipo de gobierno de Amparo Marco que, “en lugar de hacer la vista gorda con los organizadores de estos eventos y ser cómplices de esta situación, puesto que muchos ediles del Acord de Fadrell residen en las mediaciones de esta plaza y no han hecho nada pese a conocer esta problemática, escuchen el clamor desesperado de los vecinos de la plaza y velen por que se cumpla la legalidad”.