CASTELLÓ. No es que el cine de proximidad nunca haya apostado en sus relatos por la diversidad sexual, pero todavía hoy es difícil encontrar cintas que empaticen por completo con las preocupaciones del colectivo LGTBI+Q y que no pasen de puntillas en su normalización en el audiovisual. Como todo hay excepciones y el año pasado se estrenaba en Castelló una webserie llamada La vida es drag que se sumergía en la doble vida de Fernando Palazuelo, un reputado sastre de València que por las noches se transformaba en Totó la Piconera. Durante la trama el protagonista tenía que enfrentarse a las imposiciones sociales y familiares de una casa que todavía rezaba al régimen franquista. Hecha por y para el colectivo, lo que se quería y todavía quiere con este film es acabar con "los estigmas y prejuicios".
En esta misma línea, para su nueva temporada, el ciclo 'Sessió Contínua' ha hecho una pequeña selección de films y series que en los últimos años han apostado por sacar a la luz algunas de estas identidades y sentimientos que han permanecido durante mucho tiempo en la penumbra.
Es el caso del guionista y productor de Benicarló, Borja Segarra Bueno, y su serie Barbitúrica Burlesque. Andrea, que es como se hace llamar desde hace años el profesional, ha llevado hasta una plataforma de Los Ángeles esta historia, cuya protagonista, "una chica dicharachera, enamoradiza y en permanente crisis espiritual", vive al margen de las etiquetas de género impuestas por la sociedad. "'Barbi' es una 'masajista' del Raval de Barcelona que está dispuesta a ofrecer otros servicios a sus clientes habituales. Una chica de gran corazón a la que siempre se la pegan", explican en su sipnosis. Además, según palabras de su guionista, Barbi es un "frakestein" de trozos de muchos referentes. "Una pizca de Divine de Jhon Waters, una pizca de los Gael García Bernal, Javier Cámara, Miguel Bosé, Patty Diphusa de Pedro Almodóvar, La Veneno o el cigarro de Sara Montiel en el último Cuplé".
En ella, el también actor denuncia "la discriminación" a la que se ven sometidas las drags y reflexiona acerca de "la falta de libertad y la heteronormatividad que impone la sociedad". De igual modo, también reclama que los jóvenes cineastas "se atrevan" a hacer cada vez más películas "comprometidas" con todas estas problemáticas.
Con una primera temporada de seis capítulos, la webserie -con estética 'trash' y 'kitsch'- fue elegida para formar parte de la plataforma de streaming Los Angeles Revry. Una red que cuenta con grandes cineastas, artistas, creadores y visionarios comprometidos en amplificar las voces del colectivo. Además, tras ser censurada en varias ocasiones en YouTube, el proyecto ha conseguido entrar en el catálogo de Filmin, donde también se puede ver, desde el sábado pasado, su cortometraje La petite mort. En Castelló, Barbitúrica Burlesque se proyectará el próximo 19 de noviembre con la presencia y el posterior coloquio de su director.
Pero esta no será la única cinta comprometida con la diversidad sexual. El mismo día se podrá ver en el Menador Espai Cultural, Singing from the rooftops del catalán Enric Ribes. "Este es un tributo a un artista -considerado el último transformista del barrio chino de una Barcelona en extinción- que a sus 90 años sigue subiendo cada noche al escenario. Como decía (verseaba) su admirado poeta Federico García Lorca: Los mariquitas del sur cantan en las azoteas. Y Gilda Love, la protagonista de esta historia, también lo seguirá haciendo", avanza su sipnosis. Eric Ribes ha enfocado su trabajo al campo documental, logrando con ello que algunas de sus obran hayan sido seleccionadas en festivales de renombre como el Edinburgh International Film Festival o el DOKer Moscow.
No serán solo historias puramente LGBTI las que se encuentren en la cartelera de la próxima 'Sessió Continúa', pero si hay que escoger un nexo de unión entre gran parte de los films que se proyectarán esta sería la reflexión abierta sobre el amor. Como es el caso de Sushi, de la productora valenciana Mammut, afincada en El Port de Sagunt, y proyecto del cineasta de Onda Alberto Tortes y del saguntino Álvaro Díaz. Escrita y dirigida por el madrileño Roberto Martín Maiztegui, el cortometraje habla del amor como militancia. Cuenta la historia de la lucha de una pareja en crisis que se daña y se reinventa a través de las palabras. Un diálogo de 15 minutos donde pretenden superar los años de rutina y traiciones habidas y por haber, en una relación consumida por el tiempo que su protagonista aún cree poder rehabilitar.
La producción, que fue seleccionada el año pasado por la Academia de Cine entre los quince mejores cortometrajes del año para optar al Goya, se exhibirá en Castelló el próximo 17 de diciembre.
Igualmente, el mismo día se podrá ver Ráfagas de vida salvaje, producida también por Mammut y dirigida por Jorge Cantos. Una aproximación, en este caso, a la figura del "extranjero" y a como en la sociedad están floreciendo cada vez más pensamientos reaccionarios que impiden la integración total de las personas migrantes. Sül (Manel Llunell) es un chico joven que apenas conoce nada del mundo exterior que hay tras el recinto vallado donde habita con su padre (Juanan Moreno). Por eso, cada vez tendrá más ganas de hablar con los otros niños que, en su trayecto al colegio, pasan cerca del refugio donde él se esconde. Sül tendrá cada vez más ganas de ser libre, pese al miedo de que lo lastimen por ser extranjero.
Con todo, el ciclo 'Sessió Contínua' dedicará su programación de octubre, que arranca este jueves 22, a las obras de Carles Candela, creador, realizador local de cine y televisión que ha dirigido y montado más de una decena de largometrajes de ficción, documentales y series en los últimos doce años. Durante su presencia en el Menador se proyectarán sus trabajos más recientes: Vente, vente (2020), una película en la que se muestran las costuras de un proyecto "documental" a cerca de la figura del cineasta José Antonio Maenza. En ella el profesional -autor de los films El lobby contra el cordero o Hortensia- es además visto a través de dos de sus mejores amigos y compañeros: Leopoldo María Panero y Oswaldo Muñoz.
Por otra parte, también se proyectará BCRA-2 (2020), una película donde Carlos Candela se "desnuda" para enseñar extractos de un diario íntimo, escrito durante el último año y con notas visuales tomadas con su teléfono móvil en los últimos diez años. La memoria, el recuerdo, la débil separación entre salud y enfermedad, el vértigo, la cotidianidad, el miedo o el cuidado y el amparo de los demás salen a relucir durante una etapa difícil de la vida.