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València a tota virolla

Espam: el tablero donde se mueven las piezas para reimaginar la ciudad que va más allá de la inercia

Espam. O cómo reinventar los contactos entre generaciones, espacio, cultura y ciudad, emparedados entre dos crisis.

18/07/2020 - 

VALÈNCIA. Laura Blázquez, Anna Celda, Adrià Garrido, Samuel Hernández, Alicia Marco, Pau Mendoza y Pau Olmo hacen Espam Aunque en lugar de llegar a la bandeja de correo equivocada, pretenden enfocar unas cuantas anomalías en la encrucijada entre espacio, cultura y ciudad. Hace cerca de un año, bajo el cobijo de ideas medio monástico de Trinitat 10, abrieron las compuertas. Este equipo de siete estudiantes de arquitectura y diseño, vinculadas al arte y a la cultura, cruzaron a agentes de la ciudad, buscando calibrar algo tan etéreo como lo es la efervescencia, esa bruma que deja por rastro las olas al golpear la costa.

En parte como una salida por la tangente y por cierta incapacidad para encajar solo en una casilla: “Somos parte de un tejido de estudiantes activas y despiertas, que se mueven dentro y fuera de los entornos académicos y que excede mucho más allá de los límites de este equipo: un tejido de relaciones afectivas, intelectuales, artísticas y culturales que se ha ido conformando de forma natural a lo largo de nuestra formación y que ha jugado un papel crucial en nuestros distintos desarrollos colectivos, pero sobretodo en nuestro desarrollo personal”.

Esta necesidad de diálogo multicruzado ha terminado siendo también una respuesta inmunitaria de una generación en sándwich, emparedada entre dos crisis: “Pertenecemos a la generación que empezó su formación en los ecos de la crisis del 2008 y que se incorpora al mercado laboral en el umbral de un escenario insólito en el que muchas voces vaticinan una crisis sin precedentes. Cuando empezamos la universidad, las huellas de la crisis económica, política y social se dejaban ver a nivel global y las disciplinas del diseño estaban especialmente resentidas. Fuera por necesidad o porque realmente se creía ineludible un cambio de paradigma, cuando empezamos a formarnos existía un caldo de cultivo único del cual todas bebimos y que nos ha permitido desarrollar un planteamiento crítico desde el que hoy nos guiamos para afrontar los retos del futuro a través del apoyo mutuo y la colaboración”.

Espam, espam. Desde entonces profesionales y colectivos han ido generando, a su vera, discursos en torno a gran parte de las anomalía y retos que presenta la ciudad cuando se cruza con la creación artística, volcándolo aquí. “Se transforma hoy en una cartografía virtual, donde conviven imágenes, gráficos y palabras que pretenden reflejar parte de una red de creadoras, localizar propuestas y hacer un acercamiento subjetivo a una escena y a una ciudad en ebullición”. Son también un tablero donde se mueven las piezas que deben reimaginar la ciudad que va más allá de la inercia.

Aprovechando, les pedimos que hicieran, ejem, espam, a través de ocho apuntes, como ocho voces.

Espam

Uno. Teresa Juan

Artista y gestora cultural desde Wichita Co y melibeas.
Contra los espacios que sirven para encontrarlos a todos

“Asumiendo la dimensión política de la práctica cultural, de la misma manera que la del diseño y la arquitectura, es importante que para maximizar su poder transformador se aplique un planteamiento crítico que tenga como fin el acceso a la cultura de toda la ciudadanía sin que esto signifique una precarización del sector y de sus profesionales. En este sentido, las instituciones han de posicionarse no participando de la cultura como un activo de mercado o la banalización de su práctica y discurso. Es hermoso que la cultura no entienda de barreras, ver que crece entre las grietas, pero a medida que el sistema ha normalizado el discurso, ha propiciado que se debilite su raíz reivindicativa y ha tergiversado el sentido. Es importante dignificar los espacios culturales y la gestión y programación de los mismos, pero lo es más apoyar a las profesionales del arte y la cultura, tanto los más consolidados como los menos”.

Dos. Marisa Gallén

Cofundadora del estudio La Nave, premio Nacional de Diseño 2019.

“Vosotros, entre las cosas buenas que tenéis como generación, se encuentran la tolerancia hacia la diversidad, el respeto y la igualdad, además, tenéis conciencia ecológica. Eso es un gran avance para mirar el futuro con esperanza (...) La situación que estamos viviendo constata, una vez más, la necesidad de cambiar los modelos de producción y de consumo y el diseño tiene que ser un aliado imprescindible en esta transición.”

Tres. Carlos Pastor

Arquitecte per la Universitat d’Alacant.

“Amb una lectura encara hui vigent, apareixen com artefactes neutres, però en realitat els edificis -i les institucions que acullen- són aparells disciplinaris que acoblen violentament a humans i no humans a l’ordre social establert (...) Les zones franques portuàries, les escoles d’arquitectura o els museus d’art participen de la mateixa ficció política que sustenta les nostres vides.”

Cuatro. Patricia Ferragud

Arquitecta y estudiante de urbanismo y gestión de la ciudad. Teclista del grupo La Plata.

“Desde la arquitectura y el urbanismo, es hora de que estas profesiones –y también sus escuelas– sean responsables y conscientes de su dimensión política y ética para lograr la transformación positiva de las ciudades (...) No dejan de surgir prácticas y grupos de cultura que están poniendo en el centro la interdependencia, los cuidados y las comunidades, que han dejado de creer en el sujeto autónomo creador, que construyen y viven la cultura en común.”

Espam

Cinco. EntreBarris

Xarxa de col·lectius i associacions veïnals de diversos barris de València que reivindica el dret a la ciutat dels veïns i veïnes.

“Una cultura arrelada a cadascun dels nostres barris i a la nostra ciutat on posem en valor el nostre patrimoni, les nostres expressions culturals autòctones i on aquest model cultural servisca per establir lligams entre el veïnat i no, solament, per atraure visitants (...)“Un barri on abans hi havia locutoris, restaurants de diferents nacionalitats o “tendes de tota vida” i on ara hi ha galeries d’art, cafeteries “brunch” o botiges vintage.”

Seis. CARPE: Aitor Deza, Irene Reig y Maje Reig

Estudio de diseño que trabaja desde un enfoque experimental y colaborativo en la arquitectura, el placemaking, la comunicación y la innovación cívica.

“Vemos más claro que nunca el poder transformador que tiene la cultura, el arte y el capital social de las nuevas profesionales, no solo para dar contenido, sino para activar espacios urbanos e imaginarios colectivos. Nos ilusiona pensar que Espam, al igual que CARPE, nace de la Escuela de Arquitectura y plantea desde una perspectiva amplia, diversa e inclusiva, caminos para escribir la sociedad contemporánea que queremos vivir. Tanto dentro como fuera de la disciplina.”

Siete. PIANO PIANO (Maria Donnini y Maria Grifo) y José Aguado

PIANO PIANO entiende el proceso de hacer arquitectura como un universo conformado por multitud de cosas arbitrarias que pueden dar una respuesta adecuada si se entremezclan. José Aguado aborda en su práctica desde estrategias digitales y de comunicación al periodismo y la música electrónica.

“Podemos decir con total convicción que ESPAM y las futuras experiencias que de ella deriven, podrán ocupar el límite difuso del dentro y fuera, lo ambiguo entre el espacio y la ciudad, el maravilloso espacio intermedio de tensión que separa la vida secreta de los edificios con el espacio que permanece en ellos.”

Espam

Ocho. LUCE y Lebrel

Artista y diseñador.

“Existe una tensión entre el hacer público y mantener la privacidad como mecanismo de resistencia frente a los círculos reglados del arte”, “Ahí es donde me siento realizado, sobre todo descubriendo sitios. Conocer la calle por la noche te da una perspectiva distinta, es como ponerte en medio de una rotonda: un lugar que has visto miles de veces pero que nunca habías pisado.”

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