CASTELLÓ. Ya está todo listo para que la segunda fase del acceso ferroviario a PortCastelló esté acabado a principios de 2026 como está previsto. El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) ha adjudicado y formalizado el último contrato que permitirá el desarrollo y ejecución de las obras, referente a la consultoría, asesoría técnica y el control de la actuación en este segundo tramo, que ya se había iniciado a finales de noviembre con el desbroce de los terrenos afectados por la infraestructura.
La empresa pública dependiente del Ministerio de Transportes sacó a concurso público el mencionado contrato el pasado mes de agosto con un presupuesto de licitación de más de 3,6 millones de euros (IVA incluido) e incluía el "seguimiento y control de la correcta ejecución de las obras según las condiciones de calidad, ambientales y de seguridad" fijadas, además de otra "parte de los ensayos para el control de calidad de materiales en las obras". Todo ello, desde el comienzo de los trabajos hasta la puesta en servicio y entrega al mantenimiento de las instalaciones.
Al proceso concurrieron ocho ofertas, todas ellas presentadas por Uniones Temporales de Empresas (UTE), de las cuales finalmente la mesa de contratación ha escogido a la UTE conformada por las firmas Peyco y Sondeos, Estructuras y Geotecnia, que obtuvo la mejor valoración y cuyo importe asciende a 2,8 millones de euros (IVA incluido), con una baja de unos 800.000 euros aproximadamente. Por detrás quedaron las ofertas de las UTE Goc-Grusamar y Bac Engineering Consultancy Group-Meta Engineering-Ingecid.
Antes de las obras, la UTE adjudicataria del contrato para la supervisión debe realizar un análisis previo del proyecto, la comprobación del replanteo, la redacción de un Plan de Supervisión y debe seguir el proceso expropiatorio, entre otras cosas. Asimismo, durante y tras los trabajos, se encargará del seguimiento de la ejecución ambiental, de las mediciones, ensayos e informes técnicos para comprobar que se cumple el proyecto de obras, y tendrá que prestar asistencia a la dirección de obra en el caso de incidencias o modificados, así como asistencia jurídica y de abogados para responder a eventuales reclamaciones y escritos jurídicos de la constructora, entre otras tareas.
El nuevo acceso ferroviario se considera una conexión estratégica que enlazará las instalaciones portuarias con el Corredor Mediterráneo e impulsará el tráfico intermodal de mercancías. Tiene 8,3 kilómetros de longitud, de los que 4,7 corresponden al tramo primero, que ya estaba en construcción. El segundo afecta a los otros 3,6 kilómetros restantes y conectará el final del tramo I y el acceso al Puerto. Con la adjudicación el pasado 27 de noviembre y su formalización un mes después, Adif culmina la contratación administrativa de este segundo tramo.
Y junto a todos estos trabajos, que dependen de Adif, a PortCastelló le corresponde la ejecución de la estación intermodal -cuyo proyecto constructivo está redactando- y de la subestación eléctrica que debe proporcionar la energía para la circulación de los trenes. El pasado mes de noviembre, el Puerto encargó la supervisión técnica del proyecto constructivo de la estación, cuya redacción ya había adjudicado previamente. Concluida este revisión y cuando Puertos del Estado de el visto bueno, la Autoridad Portuaria prevé licitar el proyecto, en principio durante este primer trimestre del año, de cara a empezar las obras a finales del ejercicio o principios del 2025.
Hay que recordar que la futura estación intermodal se ubicará en el trazado del nuevo acceso ferroviario sur al puerto de Castellón y ocupará una superficie de 300.000 metros cuadrados, lo que permitirá un haz de vías de recepción/expedición y de carga/descarga de mercancías para trenes de 750 metros. Todas las vías contarán con ancho mixto. Además, la estación estará electrificada.
En total, y según los datos de Adif, la inversión "en todas las actuaciones que harán realidad el acceso ferroviario sur a PortCastelló se eleva a 335,5 millones de euros". Esta segunda fase de las obras del acceso sur implican la expropiación de 463.000 metros cuadrados por valor -siempre en concepto de estimación- de 9 millones de euros, según las proyecciones que la propia Adif ha reflejado en la contratación de las obras y tal como publicó Castellón Plaza. A ellas habría que sumar otros 412.000 metros cuadrados de la primera fase en una operación que, según "el valor estimado" por la propia Adif en su presupuesto, supone el desembolso de más de 31,5 millones de euros.
En cuanto a la primera fase, en una fase más avanzada, incluye un tramo de 4,7 kilómetros desde un punto a 100 metros del Corredor Mediterráneo. Este primer segmento termina en la conexión con la futura Estación Intermodal y se divide en dos: un primer sector exterior al puerto, administrado por Adif; y un segundo que se ubicará en la red interior del puerto, administrado por la Autoridad Portuaria de Castellón.