Castelló insta a los chiringuitos a elevar propuestas para valorar el adelanto de la temporada de playa

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló invita a los empresarios de los chiringuitos del Pinar y Gurugú a presentar por escrito sus propuestas para valorar con Costas la posibilidad no solo de adelantar el inicio de la temporada de playas (está fijado para el 1 de junio), sino también de ampliar las superficies. Así lo señala el portavoz del gobierno municipal, José Luis López, quien asegura que "si hay una reivindicación, la trasladaremos al Servicio Provincial".

El consistorio, como suele ser habitual por estas fechas, licita el expediente de contratación de los servicios, que distribuye por paquetes en función de las características de cada actividad. De hecho, este año incrementa los puestos en relación a 2020 al sacar a concurso un total de 11 (seis más que el pasado curso). En concreto, cuatro para zonas de hamacas; dos para quioscos de prensa y helados; uno para escuela náutica; otro para sombrillas y alquiler de patines; y tres destinados a merenderos.

Las adjudicatarias de estos últimos hasta ahora obedecían a Atlanta, Dharma y La Playa, pero su vinculación contractual concluyó el pasado año, de ahí que ahora el equipo de gobierno vuelva a abrir la concesión. En teoría, no debería ocurrir lo mismo con el cuarto establecimiento que cada año abre sus puertas, el Solé Rototom, ya que ganó el procedimiento administrativo el anterior verano y, según las bases del contrato, tiene opción a una prórroga automática por otros 12 meses. De acuerdo con la cláusula cuarta, referida al canon mínimo por instalación y duración, se contempla la posibilidad de una ampliación. Incluso, existe un compromiso verbal de la concejala de Turismo, Pilar Escuder, según fuentes del local.

Lo que plantean los empresarios para resarcirse de las pérdidas ocasionadas en 2020 por la covid-19 es, por un lado, iniciar la temporada en mayo ante la anulación del Plan de Acción Territorial de la Infraestructura Verde del Litoral (Pativel) y, por otro, incrementar la ocupación del dominio público por la extensión del arenal. En principio, ambas sugerencias se consideran razonables por parte del Ayuntamiento, aunque López insiste en advertir que las competencias pertenecen a Costas, que decide en última instancia, siempre en sintonía con las Consellerias de Sanidad y de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad.

150 metros de ocupación

La posibilidad de aumentar el espacio, limitado a 150 metros cuadrados (20 de ellos cerrados y el resto, terrazas), solo se plantea en el Gurugú, ya que en el Pinar existe una problemática con el chorlitejo patinegro, al igual que ocurre en el Serradal. No obstante, en este caso está prohibida cualquier actividad comercial al tratarse de una playa protegida.

En la vasta área que se localiza dentro del Parque Litoral, las Concejalías de Transición Ecológica y Turismo buscan una fórmula que permita compaginar la explotación económica con la custodia medioambiental. Un informe de la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural y Emergencia Climática alerta que, a consecuencia del paso de la borrasca Gloria por la provincia en enero de 2020, la población de la diminuta ave zancudilla se encuentra en riesgo extremo en la costa castellonense. De las 11 parejas que se llegaron a contabilizar en las tres playas de la capital de la Plana en 2019, solo quedan entre seis y 9, lo que obliga a actuar de urgencia.

Sin ir más lejos, el Ayuntamiento celebró en el primer fin de semana de marzo unas jornadas de voluntariado para revegetar las zonas del Pinar y Serradal con la colocación de 1.569 plantones de matorrales autóctonos. El objetivo radica en mejorar el hábitat del chortilejo patinegro, especie vulnerable, con el fin de recuperar su censo. Para ello, igualmente resulta conveniente un espacio de confort, sin agentes externos que puedan alterar la tranquilidad respecto a la nidificación. En consecuencia, el consistorio trabaja en equilibrar las dos actividades.