Castelló se aferra a revisar la protección ambiental del Gurugú para poder 'blindar' los chiringuitos

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló se aferra a revisar la protección ambiental del Gurugú para blindar los chiringuitos a partir de 2022. De hecho, la semana próxima está prevista una reunión entre representantes municipales, los hosteleros y los técnicos de la Conselleria de Obras Públicas para buscar una solución sobre la clasificación de la playa. Como planteó la alcaldesa, Amparo Marco, el pasado 11 de junio, se trata de rebajar el nivel de custodia del arenal, mediante un informe que pruebe la inexistencia de nidos de chorlitejo patinegro. La nueva clasificación, que también afectaría al Pinar, garantizaría la explotación de los merenderos incluso en mayo.

"Lo que pretendemos es adelantarnos al año que viene. Si el problema es el Plan de Acción Territorial de Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), queremos ver administrativamente cómo podemos llevar a cabo ese cambio de calificación", explica el portavoz del gobierno municipal, José Luis López. A estas alturas del mes, desbloquear la actual situación para que los merenderos abran antes del 1 de julio se antoja una empresa harto difícil. Y es que la autorización no solo depende del Servicio Provincial de Costas, sino también de la Conselleria de Cambio Climático, cuyo departamento de Vida Silvestre debe acreditar, a través de una inspección in situ, que no se localiza ponedero de la diminuta ave, especie considerada vulnerable.

"Si fuera competencia del Ayuntamiento, mañana mismo daríamos permiso a los chiringuitos", asegura López. "Seguimos pidiendo y reivindicando a Costas que se dé solución cuanto antes", añade, recordando que desde el primer momento el equipo de gobierno se ha posicionado del lado de los empresarios.

Críticas del PP

En este contexto, la portavoz del PP en el consistorio, Begoña Carrasco, acusa a las administraciones de "pasarse la pelota unas a otras". "Los días transcurren y los hosteleros están perdiendo oportunidades para recuperarse de la crisis económica tras más de un año ruinoso debido a la pandemia, con el agravio comparativo de que en otros municipios de costa sí están funcionando sus chiringuitos desde el inicio de temporada", afirma. "No puede ser que entre Ayuntamiento, Generalitat y Gobierno central [Costas] no se coordinen para agilizar el permiso que falta. Pedimos a la alcaldesa que ponga solución a este lío y que los chiringuitos puedan abrir este mes de junio, como siempre han hecho", concluye.

Considerando que la celebración de ese encuentro a tres bandas se producirá en unos días, es posible que los empresarios reconsideren su idea de emprender acciones legales contra el Ayuntamiento para reclamar daños y perjuicios por incumplimiento de contrato. Los propietarios de Atlanta, Dharma, La Playa y Solé Rototom, los adjudicatarios de los cuatro merenderos, insisten en que la temporada de servicios de playa comenzó el 1 de junio, como se señala en el expediente de licitación. Sin embargo, en la cláusula en la que se recoge la duración, también se especifica que el periodo de cuatro meses está sujeto a la autorización de Costas, siempre de acuerdo con lo que marca el Pativel.

Según el Plan de Acción Territorial, tanto el Gurugú como Pinar y Serradal están considerados como arenales con fauna protegida. Esto significa que la apertura de establecimientos de venta de comida y bebida de carácter eventual queda limitada al periodo entre el 1 de julio y el 30 de septiembre. El año pasado, Costas consintió adelantar la actividad de ocio al 15 de junio después de que Vida Silvestre emitiera un informe sobre el chorlitejo patinegro, no encontrando presencia de nidales.

Salvamento y socorrismo hasta 2024

La Junta de Gobierno Local aprobó este viernes iniciar el expediente para contratar el servicio de salvamento y socorrismo en las playas de Castelló. El importe del contrato asciende a 1.149.998,74 euros (IVA incluido) con una duración de tres ejercicios a contar a partir de 2022. En la actualidad, la empresa Intur Esport asume la prestación. Lo hace desde 2019. El pasado año, también se encargó de la seguridad de los bañistas de Oropesa del Mar o Benicàssim.