CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló suspende sine die la segunda licitación para regularizar la Oficina Municipal de Recaudación, que está sin adjudicar desde 2016, cuando expiró la última concesión. El departamento de Contratación y Patrimonio interrumpe el concurso público en la fase de la baremación de las propuestas técnicas por el recurso de la Unión General de Trabajadores (UGT) ante el Tribunal Administrativo Central. El sindicato pide la anulación del proceso al considerar que el pliego debe recoger la subrogación del personal.
Ante la petición de la organización sindical, el TAC advierte al consistorio sobre lo imperativo de paralizar la adjudicación, sin afectar a los plazos de presentación de ofertas. Una vez cerrado, las mercantiles Coordinadora de Gestión de Ingresos (CGI) y Servicios de Colaboración Integral (SIC) se disputan el contrato, cuyo valor estimado asciende a 3,9 millones de euros si se contabiliza la prórroga de un año (1.993.010,01 euros por anualidad).
La Mesa de Contratación, después de admitir la documentación de ambas postulantes, tenía previsto abrir durante estas semanas el sobre con los criterios técnicos a fin de iniciar la baremación. Sin embargo, como consecuencia de la notificación del órgano administrativo, se considera conveniente mantener cerradas las plicas. Primero, para preservar la confidencialidad de las proposiciones presentadas por los licitadores. Segundo, ante la posibilidad de que al final el TAC resuelva anular o retrotraer el concurso al momento de elaboración de las cláusulas administrativas.
Una decisión que ya tomó a el pasado mes de junio tras dar la razón a Gestión de Tributos y Recaudación Tributaria (Getyr), una de las dos concurrentes en la primera licitación. La empresa malagueña denunció al Tribunal Administrativo Central "trato de favor" hacia la anterior concesionaria, SIC, la otra postulante. Según la reclamación, algunos requisitos eran restrictivos al no garantizarse "la libre concurrencia", incumpliéndose los principios de "tratamiento no discriminatorio y transparencia".
Getyr puso el acento en los artículos relativos a los conocimientos tecnológicos del personal, con experiencia en el manejo de un programa informático en concreto. El TAC entendió que esa exigencia impedía la participación de las mercantiles en igualdad de condiciones, por lo que obligó al Ayuntamiento a cambiar las bases.
El nuevo pliego se licitó meses después (en agosto). A los pocos días de aparecer en la plataforma de Contratación del Estado, el Ayuntamiento se encontró con un nuevo contratiempo al formalizar UGT el citado recurso. En esta ocasión, para pedir que los 20 interinos que trabajan en la Oficina Municipal de Recaudación sean asimilados por la nueva adjudicataria.
Las dependencias de la calle Gobernador tienen una especial importancia para los ciudadanos, ya que centralizan las principales contribuciones municipales. Entre ellos, el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), el gravamen de vehículos o la tasa de basura. Cualquier operación para fraccionar los recibos o abonar una deuda se realiza en esta oficina. Asimismo, atiende y soluciona los cambios de titularidad y domiciliación bancaria.