EMPRESAS

Frost-trol negocia con varios inversores la venta de la unidad productiva para garantizar su continuidad

La empresa castellonense referente en la fabricación de frigoríficos presenta un ERE de extinción, pero prevé salvar algunos trabajadores si se materializa la transmisión

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CASTELLÓ. Frost-trol, empresa referente en Castellón en fabricación de frigoríficos para usos industriales, lanza una última bala para superar los problemas económicos que arrastra desde que fue objeto de un fraude interno en 2021 y garantizar su continuidad. Así, negocia con varios inversores la venta de la unidad productiva, en una operación que si acaba en buen puerto permitirá una nueva vida a la compañía con sede en Cabanes.

Frost-trol trabaja desde primeros de año en diversas medidas a fin de revertir sus resultados. En enero abrió un proceso de negociaciones con sus acreedores con el objetivo de refinanciar su pasivo en el marco de protección de sus activos y de continuación de sus operaciones. Ahora da otro paso y busca un inversor que asuma las riendas de la fábrica, según informan fuentes de la empresa, que señalan que mantienen conversaciones con varias firmas al respecto. Por otra parte, la compañía ha presentado un ERE de extinción que afecta al conjunto de la plantilla, que actualmente está formada por 135 personas. Se trata del tercer expediente que promueve en un año. El último se acordó en diciembre de 2024, incluyó a 121 empleados y finaliza esta semana. 

Desde la firma explican que han optado por el ERE de extinción porque la posible oferta de compra de la unidad productiva excluye a parte del actual personal. De esta forma, señalan que si se confirma la operación de compraventa se recuperarían parte de los operarios, que saldrían del expediente de despidos, y si no fructifica, se ejecutaría todo el ERE y la firma no tendría más remedio que declarse en concurso de acreedores. Asimismo, la empresa está gestionando con entidades financieras la renegociación de la deuda adscrita a los activos, unos bienes que formarían parte de la transmisión. 

La histórica industria de la provincia, con más de 60 años de historia, explora de esta manera la entrada de un comprador para asegurar su porvenir. Una firma que en su sector ha sido líder y que a primeros de 2024 empleaba a 347 trabajadores. 

9 de abril, primera reunión del ERE

La dirección de Frost-trol ha citado al comité de empresa el 9 de abril a la primera reunión para tratar las condiciones del ERE. Será después de que finalice el anterior que se pactó en diciembre y que termina esta semana. En 2024 ya hubo un primer ERE que incluyó a 81 personas. Al respecto, desde los sindicatos critican que Frost-trol les ha adeuda dos mensualidades y media de salarios y que está incumpliendo el plan de pagos de las indemnizaciones por despido acordado en el expediente precedente. 

La industria confía en remontar el vuelo y vencer a unas dificultades económicas que se remontan al año 2021, cuando sufrió un fraude interno que tuvo un impacto en sus cuentas de 14 millones de euros. 

 

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