VALÈNCIA. El anuncio de un arancel del 25% a los automóviles exportados a Estados Unidos desde el próximo miércoles amenaza con impactar también sobre la automoción valenciana, que entre vehículos y componentes realizó exportaciones por valor de 172 millones de euros a este país en 2024. Una cifra que coloca a la Comunitat Valenciana como la primera autonomía exportadora a EEUU por delante de Cataluña, si bien su volumen total exportado ha caído drásticamente en la última década y apenas hubo salidas en lo que se refiere al producto final.
En términos generales, el sector del automóvil valenciano exportó en total 4.830 millones de euros el pasado año, por lo que el mercado estadounidense representaría en la actualidad el 3,6% de su volumen global, según se desprende de los datos publicados por el Ministerio de Economía, Comercio y Empresa. Aun así, Estados Unidos es el séptimo país que más exportaciones recibió de la industria de la automoción instalada en suelo valenciano, una posición relevante pero alejada de las cifras ahora registradas por Reino Unido, Alemania o Bélgica.
Aunque el volumen exportado a Estados Unidos por la automoción valenciana no vive ni mucho menos su periodo más intenso, la Comunitat Valenciana todavía aglutina más del 32% de las exportaciones españolas de este sector a EEUU, por lo que casi uno de cada tres millones de euros generados por esta industria corresponden al sector valenciano. Un escenario que la ubica como el principal polo del automóvil español en intercambios comerciales con el país presidido por Donald Trump, seguida de cerca por Cataluña, que acumula casi 167 millones de euros exportados en 2024 y un 31% del total. Muy por detrás, las siguientes regiones con más peso serían País Vasco (11,7%) y Galicia (10%).
La cifra más baja en trece años
Los daños, no obstante, podrían haber sido aún mucho peores para los intereses de la Comunitat Valenciana si el volumen exportado a Estados Unidos no se hubiera reducido de forma drástica en la última década, ya que los 172 millones de euros de 2024 suponen la cifra más baja para un ejercicio completo desde hace trece años. Parte de esa enérgica disminución se explica por el progresivo descenso en la fabricación de modelos como la furgoneta Transit de la factoría de Ford en Almussafes, un diseño que se exportaba principalmente a EEUU y que dejó de producirse definitivamente en Valencia el pasado año, pero que hace justo una década superaba las 120.000 unidades anuales.
De hecho, el pico de las exportaciones de la industria valenciana del automóvil se produjo precisamente en 2015, cuando se registraron 1.164,6 millones de euros solo en Estados Unidos, una cantidad que representaba un máximo histórico y que además suponía el 15% del montante generado por las exportaciones de la automoción de la Comunitat Valenciana. Desde entonces, el volumen exportado a EEUU ha ido en caída libre salvo por un breve repunte, y en 2020, solo cinco ejercicios después, ya había menguado hasta los 686 millones de euros. Después, en 2024, el desplome se agudizaría hasta los 172 millones, de los que solo 5 millones de euros se corresponderían con la exportación de producto final, y los 167 millones restantes serían de componentes.
Saldo comercial negativo desde 2022
Asimismo, la Comunitat Valenciana encadena ya tres ejercicios consecutivos con un saldo comercial negativo con Estados Unidos en materia de automoción, con un balance negativo de 143 millones de euros en 2024 al importar a lo largo de ese año 315 millones por los 172 millones exportados. La tendencia, no obstante, no fue siempre así, ya que cuando el músculo exportador del automóvil estaba en su máxima plenitud, se llegó a registrar un saldo positivo de más de 1.000 millones de euros al término de 2015.
De hecho, entre 2010 y 2021 el volumen de las exportaciones del sector valenciano de la automoción a Estados Unidos siempre fue superior al de las importaciones, un hecho que evidencia que el intercambio comercial con este país no pasa ahora su mejor momento en esta industria. En este sentido, los balances negativos registrados en los últimos tres años están entre los peores de la serie histórica para la Comunitat Valenciana, que se inició en 1995 según los datos del Ministerio de Economía.
Reino Unido, principal importador
De esta manera, en la actualidad hay otros ocho países que, en términos de volumen, son más relevantes ahora para la automoción valenciana que Estados Unidos. La mayoría de ellos, como no es de extrañar, pertenecen a la Unión Europea, aunque el principal destino en 2024 fue Reino Unido con cerca del 18% del volumen exportado, equivalente a 886,8 millones de euros. Una cifra algo superior a los 747,7 millones de euros de Bélgica, que aglutina el 15,5% de las exportaciones del sector del automóvil de la Comunitat Valenciana, y a los 666,2 millones que se contabilizaron en Alemania (13,8%).
Tras los países anteriores, Italia y Francia completan el listado de los cinco principales destinatarios de las exportaciones valencianas de la industria de la automoción, con 486,8 y 419,5 millones de euros respectivamente. Además, y con una cifra superior a la de Estados Unidos, el país no europeo con mayor volumen de exportaciones recibidas en 2024 fue México, con 178,8 millones de euros, un 3,7% del total, casi 7 millones de euros más que los exportados a Estados Unidos (3,6%). Por detrás, otros destinos destacados para el automóvil valenciano son Países Bajos (2,8%), Polonia (2,4%) o Turquía (2,4%).
“Preocupación” en el clúster valenciano
Tras conocerse el anuncio arancelario del presidente de Estados Unidos sobre las exportaciones de automóviles, el clúster de la automoción y movilidad de la Comunitat Valenciana (Avia) expresó una “preocupación” compartida por el “conjunto de clústeres españoles y europeos”. El sector, de esta forma, lamentó que las medidas llegan en un momento “decisivo” de transformación de la industria, y en un contexto de “creciente competencia” internacional.
“Consideramos que la Unión Europea debe reforzar sus esfuerzos para revertir estas decisiones y, al mismo tiempo, trabajar para fortalecer la industria de la automoción europea, y por ende española y valenciana”, señaló en un comunicado en el que apuntaba igualmente que los fabricantes europeos llevan “décadas invirtiendo en Estados Unidos” y son parte “del crecimiento de ese país”. Así, Avia señala que tanto los fabricantes como los proveedores han generado “cuantiosos ingresos fiscales” para EEUU.
"Estos aranceles podrían tener un impacto negativo no sólo en los fabricantes de automoción y la cadena de suministro, sino en toda la industria estadounidense", agregó Avia, que expresó igualmente que la medida es “una penalización que, probablemente, pagarán los consumidores” de ese país y será perjudicial “para los fabricantes de automóviles en EEUU”. Además, el clúster valenciano recordó que los fabricantes europeos “exportan entre el 50% y el 60% de los vehículos que fabrican a Estados Unidos, lo que supone una importante contribución positiva a la balanza comercial estadounidense”.