CASTELLÓ. El Ministerio de Transición Ecológica a dado luz verde a la declaración de impacto ambiental de la macroplanta solar Magda, que busca ocupar 472 hectáreas de suelo. Todo pese a que la Generalitat Valenciana ya había informado de su afección al territorio y el paisaje. Ahora, la Conselleria de Territorio y Obras Públicas se reitera en su posición desfavorable con dos nuevos informes. Y vuelve a ser contundente: tanto la planta como la línea eléctrica prevista "no se consideran compatibles con el territorio, siendo contrarias a un uso sostenible y racional del suelo".
Bajo el nombre de Magda, el proyecto impulsada por el grupo francés Akuo y el chino Premier pretende implantar más de 250.000 paneles solares para alcanzar una potencia pico de 150 megavatios, además de erigir una línea de muy alta tensión de 52 kilómetros pasando por 10 municipios diferentes. Tanto ayuntamientos como la administración autonómica presentaron sendos informes en el proceso de exposición pública pero el Ministerio ha acabado dando curso a la declaración de impacto ambiental con varias condiciones a los promotores.