CASTELLÓ. La provincia de Castellón se ha abierto paso en el mapa inmobiliario internacional como un destino atractivo para la compra de vivienda, especialmente entre franceses, alemanes y neerlandeses. Según el portal Idealista, estas tres nacionalidades concentran la mayoría de visitas extranjeras a los anuncios de viviendas en venta en la provincia, con los franceses como grupo más destacado.
En el conjunto del mercado español, el interés extranjero se reparte de manera desigual. Mientras en Alicante los neerlandeses lideran las búsquedas (19%), en Baleares son los alemanes (42%) y en Málaga aún resisten los británicos (14%). En las provincias canarias también predominan los alemanes, mientras que en Girona vuelve a destacar el empuje francés (36%). En Castellón, como en Tarragona o Guipúzcoa, los ciudadanos de Francia son los que muestran mayor interés, lo que marca una diferencia respecto a otros territorios de la costa mediterránea.
Aunque con un peso más moderado que en destinos turísticos consolidados, el 13,7% de las consultas a viviendas en venta en Castellón proceden de fuera de España, situando a la provincia por encima de Valencia y en niveles similares a Huelva o Cádiz. La combinación de precios más competitivos, un entorno natural cada vez más valorado y el dinamismo turístico explican este atractivo creciente.
Los datos encajan con las estadísticas del Colegio de Registradores de la Propiedad, que cifran en el 13% el peso de los compradores internacionales en Castellón durante el segundo trimestre del año. Este porcentaje coloca a la provincia como la undécima de España con mayor cuota de operaciones vinculadas a extranjeros, un ranking liderado por Alicante (43%).
En el conjunto del país, los foráneos adquirieron casi 93.000 viviendas en 2024, el 14,6% de todas las operaciones. Los británicos siguen siendo los más activos, pero pierden protagonismo frente a nacionalidades emergentes como franceses, alemanes y neerlandeses. El caso de Castellón confirma esta tendencia: el mercado provincial gana visibilidad en Europa y se afianza como destino en auge para quienes buscan segunda residencia en el Mediterráneo.