CASTELLÓ. Baldocer sigue con su proceso de crecimiento y ahora impulsa una ampliación de su maquinaria para atender a las necesidades de producción. La azulejera de Vilafamés, que fue adquirida en 2023 por el Grupo Lamosa, el segundo productor mundial, ha iniciado ante la Conselleria de Territorio la solicitud para un cambio sustancial de su autorización ambiental integrada para instalar una nueva prensa y otra zona de pulidoras.
Estos equipos no supondrán un aumento de la capacidad de producción ni de la superficie de la fábrica, pero variará la cantidad a utilizar de esmaltes y agua. Así, la planta mantendrá cuatro líneas de producción, estando una de las mismas diseñadas para la fabricación de láminas de gran formato, con una producción potencial anual de 12.395.000 metros cuadrados. En este sentido, la producción mantendrá los niveles de la autorización ambiental de 2020, con 930 toneladas al día, mientras el consumo de esmaltes asciende de 3.611 toneladas al año a las 9.300. Por su parte, la pulidora será la séptima de la industria.
Cabe recordar que Baldocer fabrica azulejos utilizando dos procedimientos: el de compactación en continuo que desarrolla láminas de gran formato y el sistema de prensado tradicional. El proceso se divide en varias fases: recepción de materias primas (arcilla atomizada), almacenaje en silos, prensado del bizcocho, secado, esmaltado, cocción-corte-pulido-rectificado, y clasificación, paletización, almacenamiento y distribución.
De esta forma, Baldocer implantará nuevas mejoras en sus naves del polígono La Emperadora de Vilafamés. En octubre de 2024 recibió la Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable para ampliar la planta de fabricación 1 de Vilafamés en un nuevo horno y tres rectificadoras con sus respectivos filtros.
La empresa afronta una dinámica al alza y confirma la reactivación del sector azulejero castellonense. El Grupo Lamosa ya se marcó la reactivación de las plantas de Baldocer cuando formalizó su compra. Aterrizó con una planta en ERTE y otra en parada de mantenimiento y de manera inmediata se puso manos a la obra para reanudar su trabajo y recuperar los niveles de producción. Ahora, en un contexto de reactivación del azulejo, Baldocer realiza nuevas inversiones para asegurar sus ventas en sus mercados internacionales y nacional.
Operación de compra de 425 millones
Lamosa tomó posesión en 2023 de Baldocer por un montante económico que rondó los 425 millones de euros. Se cerró en un contexto de contracción en el azulejo nacional por una crisis de demanda en sus principales mercados internacionales. Desde la compañía destacaron entonces que la operación era "muy importante para continuar su crecimiento en el continente europeo y principalmente en España". Ahora, el viento en la cerámica vuelve a soplar a favor y se dan las condiciones para un impulso a las inversiones por parte del tejido empresarial, como es el caso de Baldocer.