Dos recursos paralizan el contrato de 200.000 euros para la recogida de ropa usada en Castelló

CASTELLÓ. Dos recursos paralizan el contrato de 209.260,80 euros para la recogida de ropa usada y calzado en Castelló. Las mercantiles East West Productos Textiles y Fundación Pueblo para Pueblo impugnan la licitación ante el Tribunal Administrativo Central (TAC) al entender que existen irregularidades en algunas cláusulas del pliego de prescripciones técnicas y administrativas. En el caso de la primera concurrente, interpone una demanda de reposición por detectar que la codificación del expediente no se corresponde con la real de la prestación del servicio, ya que se trata de una catalogación referida al almacenaje de "desperdicios". Asimismo, advierte que los productos de tejido "no se pueden considerar basura", por lo que "la elección forzosa y desacertada" de la clasificación "contraviene no solo la normativa, sino que también limita la libre concurrencia".

En resumen, y como recoge en el último punto de su parte expositiva, "no se cumplen ninguno de los requisitos objetivos" del contrato. En efecto, reclama "la suspensión del procedimiento" con la finalidad de revisar las bases.

Por lo que respecta a la segunda postulante, pone el acento en el "planteamiento de la controversia", a propósito del contenido de algunos artículos. En la línea de la anterior, señala que la codificación seleccionada implica que "el acceso a la totalidad del contrato está vetado a todas las empresas especializadas" en la recogida de ropa usada y calzado. Esa prohibición conlleva "una restricción indebida de la competencia", de manera que se vulnera "la libertad de acceso" a la licitación.

Anulación del procedimiento

Fundación Pueblo para Pueblo va más allá y plantea abiertamente la anulación del expediente. Así, previene de la anomalía acerca del fundamento normativo utilizado por el Ayuntamiento para justiciar la reserva del contrato, que "excede los límites a la visión social", precisa.

La formalización de los dos recursos obliga a la Mesa de Contratación a suspender el concurso público hasta que por el TAC se dicte una resolución. No es la primera vez que el consistorio se ve abocado a interrumpir un procedimiento administrativo. En el pasado sucedió con los sumarios asociados a la limpieza de los colegios públicos, así como de las dependencias municipales.

En este caso concreto, la Junta de Gobierno Local impulsó el expediente acerca de la reciclaje de la ropa usada el pasado 22 de abril, con una duración de tres años prorrogables. Lo hizo mediante contrato reservado para privilegiar la participación de empresas sin ánimo de lucro, favoreciendo además la generación de puestos de trabajo para personas en riesgo de exclusión. Finalizado el plazo de presentación de ofertas, concurrieron tres firmas. Las dos indicadas con anterioridad y Reciplana Recuperaciones 2010.

La prestación contempla la instalación de 54 contenedores en diferentes puntos de la ciudad, sustituyendo los actuales de Cáritas, que hasta ahora venía prestando el servicio. Las tareas de recogida se realizarán dos veces al mes, excepto si se detectan desbordamientos ante los que sea necesario llevar a cabo una intervención adicional. Igualmente, se realizarán campañas de sensibilización y concienciación sobre la recogida del textil. La administración municipal también tendrá la información sobre la cantidad de ropa recogida, así como la aparición de cualquier incidencia y el destino del producto reciclado.