CASTELLÓ. Cuatro de las seis fuerzas políticas con más peso en la provincia de Castellón se preparan para vivir unos meses convulsos ante la celebración de sus congresos. A excepción de Compromís y Vox, con funcionamientos distintos, el PSPV-PSOE, PP, Unides Podem y Ciudadanos encaran procesos de renovación interna, aunque la eventualidad de la covid-19 dibuja un panorama de incertidumbre, especialmente en socialistas y populares. Las dos formaciones con mayor número de militantes o afiliados deben elegir a sus nuevos líderes en 2021, según reza su calendario estatutario. Sin embargo, Madrid decide en última instancia y, por el momento, ni Ferraz ni Génova, respectivamente, se han pronunciado en vista de cómo está evolucionando la pandemia.
De hecho, la situación epidemiológica se vislumbra como el principal escollo para que los dos partidos cumplan la hoja de ruta orgánica. Al aplicar el efecto dominó a la hora de organizar sus cónclaves, si se aplaza la cumbre autonómica, presumiblemente ocurrirá lo mismo con la cita provincial y el resto de asambleas. Además, tanto el PSPV como el PP son dados a convocar de forma multitudinaria a sus simpatizantes con el fin de aupar a los barones. Con una limitación de aforo o incluso prohibición de reuniones masivas, difícilmente será posible proclamar las nuevas direcciones Ni siquiera mediante medios telemáticos, fórmula empleada en los meses del estado de alarma para preservar un mínimo de actividad.
En teoría, el principal partido de la izquierda debería abordar el próximo año la continuidad del secretario general provincial, Ernest Blanch, así como de los líderes comarcales y locales, con especial atención a la agrupación de Castelló, donde Paco Gil encabeza la ejecutiva desde 2015. Por lo que respecta al PPCS, todas las miradas están puestas en su presidente, Miguel Barrachina, que mantiene la incógnita sobre su futuro, consciente de la posibilidad de cambios respecto a la agenda congresual y que, en principio, marca junio como mes clave.
El dilema sobre cómo se acometerá la reestructuración en el PSPV y el Partido Popular caracteriza también el proceso de regeneración en Cs. Una vez nombrada Cristina Fernández como coordinadora provincial, el hermetismo es absoluto acerca de los siguientes pasos pese a que urge modificar el organigrama naranja en Castellón. No en vano, la situación de Sandra Julià como secretaria de Organización queda un tanto comprometida tras el ascenso de su compañera.
Tres semanas después de que Madrid concediera a Toni Cantó el poder absoluto del partido en la Comunitat, oficializando además los referentes de las tres demarcaciones territoriales, la confusión en los colectivos locales aumenta conforme avanzan las semanas. Tanto es así que cada vez son más las voces que dudan sobre la celebración de congresos.
En el otro lado de la balanza se sitúa Unides Podem, que tiene las ideas mucho más claras. A finales de año prevé culminar el largo camino iniciado en septiembre para implantar un nuevo modelo organizativo. En el caso concreto de la capital de la Plana, su actual secretario general, Fernando Navarro, ya ha adelantado que se presentará a la reelección después de asumir el cargo en abril de 2018 en sustitución de César Jiménez.
La formación morada abrirá en breve el plazo de presentación de candidaturas para promover las votaciones a partir del 18 de noviembre, con un plazo máximo de un mes para que todos los afiliados puedan participar en las primarias. Antes de entrar en 2021 se conocerán los nuevos portavoces municipales y los Consejos de Coordinación.