CASTELLÓ. El mecanismo de coordinación interna activado en el Acord de Fadrell, como consecuencia de restablecer la normalidad en las relaciones entre el PSPV, Compromís y Podem-EUPV, empieza a tener efectos directos en la gestión municipal. Al margen de los presupuestos, de las votaciones como un bloque o del mensaje unitario, el cambio más significativo afecta a la Junta de Gobierno Local, que a partir de ahora incrementará sus competencias.
La aprobación de los programas de carácter temporal, para nombrar funcionarios interinos o contratar personal laboral y sus prórrogas, dejarán de ser responsabilidad del concejal implicado en las contrataciones y del regidor de Hacienda (en esta legislatura, David Donate), cuya firma debía aparecer siempre en el decreto.
La Junta de Gobierno Local se encargará de autorizar los puestos de trabajo del personal del Ayuntamiento de Castelló. La medida, que rebajará la responsabilidad del citado edil de Hacienda, permitirá un mayor control de los tres partidos respecto a las nuevas contrataciones. Además, reforzará los canales de "transparencia y difusión", como subraya el portavoz del gobierno local, Rafa Simó.
La implementación de herramientas de armonización está recogida en los acuerdos adoptados para resolver la crisis abierta a raíz del polémico pleno del 19 de diciembre. Esos instrumentos inciden en tres aspectos esenciales: la buena fe, la confianza legítima y la lealtad institucional.
Sin que los concejales pierdan en ningún momento su autonomía, sí que es cierto que el mecanismo de coordinación refuerza la necesidad de consensuar la toma de decisiones en aquellos asuntos de especial relevancia. Por ejemplo, la mejora o ampliación de la plantilla funcionarial en el consistorio.
En la actualidad, el número de empleados municipales se eleva a 1.500, de manera que autorizar nuevos programas de contratación no es un tema menor.
Como en su día defendió la alcaldesa, la socialista Amparo Marco, lo que se pretende con el "Reacord", como así lo bautizó el portavoz nacionalista, Ignasi Garcia, es fortalecer el Fadrell para aprovechar las oportunidades que ofrece cualquier crisis. En este contexto, el aumento de competencias de la Junta de Gobierno Local, presumiblemente, irá acompañado de otras medidas de carácter estructural para multiplicar la eficacia en la función pública.