El Fadrell teme que la solución de las tascas de Castelló se posponga a la siguiente legislatura

CASTELLÓ. El Acord de Fadrell teme que la solución de las tascas de Castelló se posponga a la siguiente legislatura. A pesar de que la empresa adjudicataria de las mediciones, Acústica y Telecomunicaciones SL (Acusttel), concluyó su evaluación antes del pasado verano, lo cierto es que desde la concejalía de Transición Ecológica existe cierto recelo sobre la validez de los resultados atendiendo a la nueva normativa de ámbito autonómico.

El 29 de diciembre de 2021, la Ley de acompañamiento modificó el contenido de varios preceptos. Entre ellos, el que afecta a la protección contra la contaminación acústica. Más concretamente, a lo que se entiende por 'día' y 'noche' en espacios públicos tradicionales de municipios de 150.000 a 200.000 habitantes, como es el caso de la capital de la Plana. Según el cambio, vigente desde entonces, el horario diurno se alarga 60 minutos al pasar de las 22.00 a las 23.00 horas.

Una corrección sustancial y que el propio Ayuntamiento de Castelló había reclamado tras recibir el primer informe de Acusttel, que constata picos de decibelios por encima de lo permitido a las 10 de la noche. En efecto, un serio contratiempo para solicitar la eliminación de la Zona Acústicamente Saturada (ZAS) en las tascas.

Las dudas surgen sobre la viabilidad de los datos, teniendo en cuenta que se tomaron cuando la ley autonómica establecía las 22.00 horas como límite del horario diurno, a diferencia de la que marcan la ordenanza municipal y la reglamentación Estatal (23.00 horas).

Los dos escenarios posibles

Si la Conselleria entiende que esos valores son atemporales, independientemente del marco jurídico, entonces no habrá problemas. Otra cosa bien distinta es que considere que se trata de situaciones distintas (antes y después de ese 29 de diciembre de 2021). En este caso, habría que comenzar prácticamente de cero, por lo que resultaría insuficiente el margen del presente mandato (hasta mayo de 2023) con vistas a encontrar una solución a las tascas.

A la espera de que la dirección general de Calidad Ambiental se pronuncie, el Fadrell ha pedido a la empresa que redacte un documento con las estimaciones actualizadas en función de los nuevos horarios diurno y nocturno. Además, también ha encargo una interpretación de las mediciones para, a partir de las conclusiones, valorar la posibilidad de iniciar los trámites con el propósito de reclamar la supresión de la ZAS.

Ese trabajo extra para Acusttel no encarece el contrato que se adjudicó en diciembre de 2020 debido a que sigue vigente por las interrupciones sufridas a consecuencia de la covid-19. No en vano, la prestación se suspendió hasta en dos ocasiones. Por un lado, durante el primer estado de alarma. Por otro, en plena tercera ola, cuando el Consell decretó el cierre de la restauración al dispararse los contagios y las muertes. Ambas paralizaciones condicionaron no solo los 12 meses de controles, sino también el posterior trabajo acerca de las conclusiones.