CASTELLÓ. Nuevo cambio de rumbo en el Ayuntamiento de la Vilavella. Tras la dimisión del que era el alcalde socialista hasta el miércoles, Manel Martínez, después de la difusión de una grabación en que se le oye proponer a la presidenta local del PP, Inma Traver, facilitarle su continuidad en su trabajo en la Diputación si le apoyaba en la investidura, el pleno en que este jueves se abordaba la elección del nuevo primer edil ha derivado en un giro radical de los acontecimientos.
Y lo ha hecho porque el edil fugado del PP, Abelardo Zaragoza, ha cambiado el sentido de su voto tan solo un mes y medio después (entonces solo fue necesaria su abstención, en forma de ausencia del pleno constitutivo, para que resultase elegido Martínez) y este jueves ha dado su apoyo, y con ello la vara de mando, a la candidata de Independents per la Vilavella (IxLV), Carmen Navarro. Zaragoza explica que, una vez conocidas las presiones de Martínez sobre Traver, "no podía mantener al PSPV en la alcaldía" y por ello ha decidido el cambio de gobierno.
A partir de ahora se abrirán negociaciones para definir el papel de Zaragoza en la nueva corporación, ya que su voto es todavía más importante que antes y, asegura, "todavía no he hablado" ni con Navarro ni con Traver, con quien se enfrentó una vez conocidos los resultados electorales, lo que derivó en su fuga de las listas populares.
De hecho, de lo poco que ha trascendido del pacto de gobierno entre IxLV y el PP destaca que será el número 3 de las listas populares, Vicente Martínez, será el que tome el relevo de Navarro como sucesor en la Alcaldía en la recta final del mandato. Esto está sin duda marcado por el enfrentamiento entre Zaragoza y Traver con el objetivo de que el que fuera número 1 del PP no se oponga al alcalde popular.
Aun así, el concejal no adscrito no da un cheque en blanco a los nuevos gobernantes. Y es que IxLV suma dos concejales y el PP 3, por lo que necesitan su apoyo para llevar a cabo sus proyectos. "Apoyaré las propuestas que me parezcan oportunas para el pueblo", señala al respecto.
Abelardo Zaragoza tampoco descarta entrar en el equipo de gobierno. Ni tan solo, ejercer como alcalde: "Según lo que me planteen, veré lo que hago. Está todo en el aire, no sé si van a ofrecerme la alcaldía algún año o no. No me han dicho todavía nada". Con ello, el concejal no adscrito sigue teniendo la llave de gobierno de la Vilavella.
En la vertiente contraria, Manel Martínez continúa, al menos por el momento, como concejal del Ayuntamiento de la Vilavella. Si así continúa cuando deje de estar afiliado al PSPV-PSOE, deberá pasar al grupo de no adscritos. Este diario ha tratado de obtener una valoración sobre cuál va a ser su modo de proceder, pero Martínez no ha querido señalar nada al respecto.
Tras el cambio de gobierno en la Vilavella, la nueva alcaldesa, Carmen Navarro ha destacado que con ello "gana la democracia. Es momento de ponernos atrabajar por lo único que importa, nuestro pueblo, la Vilavella". Por su parte, Vicente Martínez ha destacado que el nuevo proyecto ha de atraer a la localidad "calidad de vida, servicios y prestaciones que den bienestar a nuestro pueblo". Atrás, ha señalado la alcaldesa, "deben quedar capítulos oscuros que han provocado que nuestro pueblo sea humillado".
Por su parte, desde el PSPV local han señalado que el cambio de gobierno confirma que ha habido "una maniobra orquestada para arrebatar la alcaldía a los socialistas". Su portavoz, Sebastià Roglà, insiste en que con el relevo "se ha confirmado que detrás de toda esta polémica [que provocó la dimisión del anterior alcalde] solo había un objetivo: quitar la alcaldía al PSPV costase lo que costase". Además, el cambio de primer munícipe, señala Roglà, demuestra que los socialistas "no habíamos hecho nada más que sumar nuestros votos en el pleno del 15 de junio y fue el PP el que tenía un problema con su candidato".