CASTELLÓ. La pugna interna abierta en el PSPV-PSOE de Castellón para conformar la bancada socialista que debe servir de base al nuevo gobierno de la Diputación ha quedado decantada de manera muy favorable a los postulados que defendía la ejecutiva provincial en detrimento de las direcciones comarcales, que han visto cómo se las ha relegado en este reparto.
La renuncia de los socialistas de Vila-real -expresada en la noche de este lunes a través de un comunicado donde no faltan críticas al comportamiento "sectario" de la dirección que encabeza Ernest Blanch- no ha hecho más que certificar la victoria del aparato provincial, refrendado -aunque con matices- por Ferraz, en Madrid, y un más que evidente cierre de filas con Carcagente, sede de la dirección provincial socialista en Castelló.
En este escenario, y con las dos últimas puntualizaciones hechas por la comisión de listas federal, a los concejales socialistas solo les queda ya pasar a votar, entre los próximos miércoles y jueves, las candidaturas de miembros propuestos por el aparato de partido. La posibilidad de presentar listas alternativas, que les puedan suponer expedientes disciplinarios, parece desactivada. En las comarcas más rebeldes, la Plana Alta y Els Ports-Maestrat, se mostraban en la noche de este lunes resignados con la decisión de Ferraz, aunque en esta última todavía no se han registrado las listas ante la Junta Electoral, al contrario de lo que ha sucedido en el resto de comarcas.
Todo ello con una dirección provincial satisfecha con el resultado, merced a un leve ajuste impuesto por Ferraz, requerimiento que solo atendía a medias las demandas de Els Ports-Maestrat, al incluir a la alcaldesa de Benicarló, Xaro Miralles, y no a su secretario comarcal y alcalde de Rossell, Evaristo Martí. Junto a Miralles, Ruth Sanz, vicesecretaria provincial del partido y muy próxima a Blanch, se mantiene en la lista. Asimismo, la entrada de la primera edil de la Vall d'Uixó, Tania Baños, también de la corriente de Blanch Sumem futur, es vista como un guiño al secretario de Organización del PSPV-PSOE, José Muñoz.
Y es que para unos estas "correcciones" suponen "vestir a un santo para desvestir a otros" sin entrar en el fondo del problema. En el camino han quedado ciudades importantes sin representación, como es el caso de Burriana (debido a la salida de su concejala Maria Lluïsa Monferrer para dar entrada a Baños) o la propia Vila-real, entre otros núcleos con sonadas victorias socialistas el pasado 26-M. Para llegar a esta escenario, ha sido clave la intervención del propio secretario general del PSOE, José Luis Ábalos o el propio Muñoz, según señalan fuentes internas del partido, que entiende que esta decisión no ha hecho más que elevar el grado de frustración en este proceso de selección de los nuevos diputados provinciales.
Así las cosas, cerrada las pugnas internas, aunque no las desavenencias intestinas, el PSPV-PSOE ya piensa en dar forma al nuevo gobierno de la Diputación, para cuya presidencia cobra mayor fuerza el nombre de quien vuelve a refrendarse como alcalde de Sueras, Josep Martí. Entretanto, los socialistas comenzarán este martes a negociar con Compromís un acuerdo que les permita asegurar la estabilidad necesaria para sacar adelante el que pretende que sea su nuevo modelo de Diputación.