VILA-REAL. Los hosteleros de Vila-real han protagonizado este miércoles una sonora cacerolada en la plaza Mayor donde, tal como habían anunciado, será el escenario de una concentración semanal con el fin de dejar patente su enfado y visibilizar, de este modo, su protesta contra el cierre impuesto por el Gobierno valenciano, además de protestar por unas ayudas que entienden son "totalmente insuficientes" para compensar mínimamente sus pérdidas.
Decenas de hosteleros han arrancado así el calendario de protestas con críticas a las medidas restrictivas que, según entienden, "criminalizan al sector" y que contravienen los principios de la Constitución. Los manifestantes han expuesto en un comunicado su condena por lo que consideran una decisión injusta y que lleva a muchos negocios a echar el cierre, lo que conlleva un enorme daño al empleo en Vila-real, según los testimonios recogidos.
Fotos y vídeo: Toni Losas