CASTELLÓ. PortCastelló promueve la competencia entre las terminales para potenciar la llegada de nuevos contenedores. Con este fin, la Autoridad Portuaria de Castellón ha aprobado la tercera licencia para operar mercancía general en sus muelles, una autorización que corresponde a Terminal Marítima del Grau.
De esta manera, la empresa podrá gestionar mercancía de este segmento de tráfico, sea o no contenerizada, además de granel sólido, para lo que ya tenía autorización. Con la nueva concesión se suma a las dos terminales de Noatum.
No en vano, uno de los retos de la Autoridad Portuaria es aumentar los movimientos del tráficos de contenedor, que desde 2019 han sufrido un descenso de un 64 %.
Hasta el momento, y después de la compra de APMT Castellón, solo Noatum podía operar contenedores. Terminal Marítima del Grau estaba limitada al tránsito de graneles sólidos en el Muelle de la Cerámica, pero ahora el Boletín Oficial del Estado acaba de publicar la modificación sustancial de la concesión de TMG que acordó el último consejo de administración de la Autoridad Portuaria, que permite al operador hacer cargas y descargas de mercancía general, en busca sobre todo de captar más contenedores.
Con ello, PortCastelló ya dispone de dos concesionarias que pueden trabajar con contenedores en tres terminales. Fuentes portuarias resaltan que esta modificación responde a "su apuesta por abrir a una mayor competitividad de los tráficos de mercancía general, una operativa que solo podía realizar Noatum".
El presidente del puerto, Rubén Ibáñez, destacó en el último consejo este cambio de interés portuario "dado que mejora la posición competitiva del puerto de Castellón en un mercado objetivo, como es la mercancía general, en el que aspiramos a ocupar una posición más relevante que la actual, ayudando a optimizar los incrementos de capacidad en la terminal TMG".
La solicitud de ampliación del objeto concesional de TMG "está alienada con la estrategia de la Autoridad Portuaria de potenciar la competitividad de los servicios portuarios de manipulación de mercancías prestados por las terminalistas en el puerto de Castellón, así como la diversificación de tráficos", abundó Ibáñez.
El puerto de Castellón aprobó en 2018 la concesión del Muelle de la Cerámica a dos empresas en operativas centradas en el tráfico de graneles sólidos: una zona fue asignada Noatum, y una segunda a Terminal Marítima del Grau.
Por otra parte, la llegada de contenedores se sitúo en 2023 en un total de 71.782 TEUs. La caída de este tráfico ha sido paulatina desde 2017, cuando se alcanzaron los 240.895, y en el último año esta tendencia se agravó por el parón de la industria cerámica, con una reducción interanual de un 45 %.
De esta manera, el movimiento de TMG se produce un año después de que Noatum impulsara una importante operación de expansión en el puerto con la compra de APMT Castellón, que tiene su concesión en el Muelle del Centenario.
La ampliación de la concesión se suma a otras apuesta de TMG, que ya ha finalizado la primera fase en las obras de mejora comprometidas cuando se aprobó su concesión en el Muelle de la Cerámica. Así, ya ha acabado la construcción de dos nuevas naves, lo que ha supuesto una inversión de 5,7 millones de euros. Ambos espacios suman una superficie de 8.000 metros cuadrados y una capacidad, cada una, de 40.000 toneladas de mercancías. Asimismo, contemplan criterios de sostenibilidad para potenciar la gestión ambiental en el manipulado de graneles.
Asimismo, la firma tiene pendiente la instalación de un proceso de mecanización, valorado en 2,2 millones de euros, que permitirá el transbordo de los cargamentos de forma directa a través de unas cintas desde los barcos a las naves sin tener que recurrir a camiones u otra maquinaria. Hay una primera parte de mecanización que se prevé acabar en junio, y una segunda en diciembre.
