CASTELLÓ. El president de la Generalitat, Ximo Puig, cree que Argelia "cumplirá sus compromisos" de abastecimiento de gas a España. Con esta frase, el jefe del Consell ha querido lanzar un mensaje tranquilizador al sector cerámico castellonense, que ha visto cómo en las últimas semanas una nueva amenaza se cierne -con la posibilidad de ruptura de contrato incluida-, sobre su ya complicado abastecimiento energético.
A pesar de esta confianza en el futuro -"las noticias que tenemos es que no se llegará a ningún tipo de cierre" del gasoducto, ha dicho Puig-, el president también ha lanzado un dardo a la Moncloa tras la crisis desatada por la postura de España en el conflicto sobre el Sahara. "El Gobierno tiene que dar la máxima estabilidad a esta situación", ha señalado Puig en la inauguración de una exposición en el Museu de Belles Arts de Castelló.
"Hay que garantizar el escenario de máxima concordia posible", ha reiterado el presidente valenciano, con el objetivo de "estabilizar la situación del gas" y, si es posible, "bajar precios". Esto a corto plazo, porque a medio y largo Puig apuesta por lograr la autosuficiencia de la Comunitat Valenciana "a través de las renovables", ha señalado.
También en lo que se refiere al clúster cerámico, Puig ha dicho que el Consell está "trabajando en cómo se articulan" las ayudas para las empresas que no se beneficiarán de las medidas con que el Gobierno quiere compensar la escalada de precios derivada de la guerra en Ucrania. Así, y después de que los fabricantes de esmaltes hayan quedado fuera de las subvenciones estatales, Puig ha señalado que todavía se ha de definir el plan autonómico por valor de 50 millones. Este constará de dos líneas, ha dicho: una para empresas que no reciban ayudas del Estado; y otra "para autónomos, con 100 euros mensuales" y un máximo de 300.