Conselleria se agarra al Pativel y pone más difícil que los chiringuitos abran antes del 1 de julio

CASTELLÓ. La posibilidad de que los cuatro chiringuitos del Gurugú y Pinar abran antes del 1 de julio se pone cada vez más cuesta arriba. La dirección general de Puertos, Aeropuertos y Costas, a través del negociado de Vida Silvestre y dependiente de la Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, enviará un informe en los próximos días al Servicio Provincial de Costas (Ministerio de Transición Ecológica) para advertirle que, según lo que establece el Plan de Acción Territorial de Infraestructura Verde del Litoral (Pativel), del 1 de marzo al 30 de junio está prohibido ocupar el domingo público de ambas playas al considerarse espacios protegidos por el chorlitejo patinegro, especie catalogada como vulnerable.

Fuentes de la Conselleria aclaran que, aunque la valoración será negativa respecto a un hipotético adelanto de la temporada de explotación de servicios, como reclaman los empresarios, corresponderá en última instancia a Costas tomar una decisión definitiva. La evaluación autonómica tendrá un carácter meramente orientativo y en ningún caso "vinculante", subrayan las mismas fuentes. "El informe irá en la línea de lo que marca la normativa", en alusión al decreto  58/2018, de 4 de mayo, del Consell, por el que se aprobó el mentado Pativel, que sigue vigente pese a la anulación decretada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV), ya que la Generalitat recurrió.

El catálogo del Plan de Acción Territorial establece dos categorías de arenales urbanos en función de su naturaleza. Aquellos que carecen de fauna y flora amenazadas, pueden registrar actividad de ocio desde mayo. Sin embargo, los que cuentan con algún tipo de rango de conservación, como ocurre con el Pinar y Gurugú, tienen restringida la explotación, limitándose al periodo estival que va del 1 de julio al 30 de septiembre.

Lo que dice el contrato

Ante este panorama, los empresarios de Atlanta, Dharma, Solé Rototom y La Playa, que son los cuatro merenderos afectados, barajan emprender acciones legales, aunque la redacción del expediente licitado por el Ayuntamiento de Castelló apenas deja resquicios legales. En el punto 3, referido a la duración del contrato, se señala que el periodo del 1 de junio al 30 de septiembre "quedará, en todo caso, condicionado a la obtención de la autorización que [...] Costas conceda para la ocupación de los terrenos de dominio-público marítimo-terrestre".

El año pasado, tanto los hosteleros como el propio consistorio se encontraron con la misma problemática acerca del chorlitejo. En esa ocasión, el servicio de Vida Silvestre informó favorablemente para que los chiringuitos comenzaran a montar a partir del 15 de junio. Lo hizo, a instancias de una solicitud del Ayuntamiento y tras comprobar la ausencia de nidos de la diminuta ave en el Gurugú y Pinar. La prospección de los técnicos se realizó de forma presencial.

El representante de la asociación que aglutina las actividades relacionadas con las playas (Adepla), Javier Alegre, alertó este miércoles a Castellón Plaza que, de persistir el cierre de sus negocios, las pérdidas podrían rondar "el 30%". El portavoz del gobierno municipal, José Luis López, se mostró partidario este jueves de repetir la misma fórmula de 2020, esto es, que Conselleria realice una inspección in situ para determinar la presencia de ponederos. En el caso de no existir, "que hagan lo mismo", en referencia a adelantar la autorización.

Una población en declive

Un estudio elaborado por la dirección general del Medio Natural y Evaluación Ambiental recalca la población del chorlitejo va a menos en las dos playas (también en la del Serradal). De 15 parejas en 2014 se pasó a 6 en 2020. Por este motivo, a principios de 2021 la Concejalía de Transición Ecológica inició un proyecto, en colaboración con la sociedad ornitológica SEO Bird Life, para mejorar el hábitat y reforzar la conservación natural de los arenales. La iniciativa se desarrolló durante varios meses y contempló la delimitación de áreas de nidificación, sustitución de especies exóticas por autóctonas y concienciación sobre la importancia de conservar los ecosistemas.