CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló da otra paso decisivo para materializar Logistics, la plataforma industrial situada en el polígono del Serrallo y que posee una superficie de 1,7 millones de metros cuadrados. La Junta de Gobierno Local ya tiene una propuesta de la Mesa de Contratación para adjudicar la asistencia técnica a fin de redactar los proyectos de urbanización. La Unión Temporal de Empresas (UTE) compuesta por las firmas Intercontrol Levante, Planifica y Guillamón-Rubert y Asociados, esta última castellonense, se impone en la licitación tras reducir un 16% el presupuesto sin impuestos.
Esa rebaja significa que la concesionaria se compromete a realizar el servicio por 1.515.199,85 euros (1.803.809,35 euros es el valor estimado del contrato). Si a ese importe se suma el IVA, el coste final queda en 1.833.392 euros, muy por debajo de los 2.164.571,22 euros del presupuesto estipulado.
El equipo de gobierno validará en los próximos días la propuesta de adjudicación para cuanto antes firmar el contrato con la UTE. A partir de ese momento, se iniciará el plazo de ejecución de la prestación con una duración de 24 meses. En el mejor de los casos, las obras de Logistics podrían iniciarse a finales de 2026 o principios de 2027, en función de la celeridad con la licitación de los trabajos de ejecución. La amplia zona industrial resulta de la suma de dos sectores, SI-Ctra Grau-Almassora, con 786.647 m², y SI-Plataforma Logística, con 915.172 metros cuadrados.
Por la extensa demarcación y su complejidad, la asistencia técnica se alargará dos años. Este plazo se estructurará por fases. En la primera, de dos meses, se realizarán labores previas, como el borrador del plan parcial o la documentación para la participación pública en materia de paisaje. La segunda, de medio año, implicará la elaboración de los distintos estudios, desde el ambiental y territorial estratégico (Date), hasta el de movilidad o acústico. Incluso, se incorporará un análisis de ámbito arqueológico.
La tercera fase, de tres meses, corresponderá a la redacción de los expedientes sobre las alegaciones, las conclusiones del citado estudio paisajístico y una propuesta de desarrollo. La cuarta, de otros dos meses, conllevará culminar la versión definitiva del plan parcial y el programa de actuación integrada completo.
En la quinta etapa, también de dos meses, la UTE deberá aportar la documentación relativa a la contestación de las alegaciones que se hayan producido durante la exposición pública y el diseño final sobre la solución urbanística. Las tres últimas fases, con una duración global de 11 meses, se centran en los proyectos de reparcelación, el registro de las parcelas resultantes de dicha reparcelación y la contestación a posibles recursos de reposición, entre otros.
Guillamón-Rubert y Asociados no es el único despacho castellonense que ha participado en el concurso público para la asistencia técnica. También han concurrido Comaypa y Car Enginyeria Civil, que son habituales en las licitaciones impelidas por el Ayuntamiento de la capital de la Plana para obras públicas. Entre otras, se han postulado (y en algún caso logrado la adjudicación) en procesos como la segunda fase de la Zona de Bajas Emisiones, la construcción del parking disuasorio en la estación de tren o la urbanización de La Joquera.