CASTELLÓ. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló, compuesto por el PP y Vox, tendrá que esprintar con el presupuesto de 2025 en diciembre si pretende aprobarlo por pleno antes de concluir el año. Al menos, por Junta de Gobierno Local (JGL). A medida que transcurren las semanas, el calendario se aprieta cada vez más, con lo que apenas queda poco más de mes y medio de margen de maniobra.
Para que el ejecutivo local avance con su cronograma, resulta imperativo que estén resueltas las nuevas cuentas de los organismos autónomos, esto es, los tres patronatos (Turismo, Fiestas y Deportes) y el Pacto Local por el Empleo. En la actualidad, se está en la fase de alegaciones, por lo que la previsión pasa por tenerlos cerrados a mediados de mes.
A partir de ese momento, la elaboración del informe presupuestario debería coger velocidad de crucero para culminarse en un plazo de 15 días, aproximadamente. De hecho, según los cálculos que maneja el bipartito, diciembre se vislumbra el mes clave con vistas a cumplir el objetivo de avalar el presupuesto de 2025 en JGL.
Hace unas semanas el portavoz del gobierno municipal, Vicent Sales, reconoció la necesidad de reajustar el calendario establecido en mayo, cuando se firmó la orden de los planes departamentales y que marcaba como ambiciosa meta activar el nuevo proyecto económico el 30 de noviembre. Según explicó, el motivo de variar la hoja de ruta se justificó por el retraso derivado de la tramitación de las ordenanzas fiscales. Al tener que revisar con mayor detalle los impuestos para aplicar medidas compensatorias frente al basurazo, los tiempos fijados en un principio se vieron afectados.
Si el nuevo pronóstico del bipartito se cumple, diciembre será un mes de locos. En tan solo 14 días se podrían celebrar una Junta de Portavoces y dos comisiones plenarias antes de elevar el presupuesto al pleno. La primera cita serviría para aprobar las cuentas municipales. Los dos siguientes permitirían a la oposición (PSPV y Compromís) presentar las enmiendas.
Salvo un giro inesperado respecto a la tramitación administrativa, parece complicado que la corporación pueda votar en sesión plenaria el presupuesto de 2025 antes de finalizar el año. Todo apunta a que ese pleno, presumiblemente extraordinario, tendrá lugar en enero. En función de cuándo sea la convocatoria, la entrada en vigor de las nuevas cuentas municipales se producirá durante ese mes (a finales) o en febrero.
En efecto, es lo mismo que sucedió en 2023. El bipartito autorizó el proyecto financiero por Junta de Gobierno Local en diciembre y lo verificó el 18 de enero de 2024 por pleno. Su activación se materializó a mediados de febrero después de la publicación en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).