CASTELLÓ. La crisis inmobiliaria de 2008 sacudió los cimientos de la industria cerámica de Castellón y provocó una importante transformación de la misma. Ante la caída del mercado nacional las empresas se fueron entonces a la búsqueda de compradores exteriores y reforzaron su internacionalización. Al cabo de unos años y después de un duro ajuste laboral, el azulejo renació con brío azuzado por sus exportaciones. Las ventas externas pasaron a ocupar el 70% del total y las nacionales bajaron al 30%. En 2022, la cerámica volvió a sufrir un doble golpe con el aumento de los costes energéticos por la Guerra de Ucrania y la caída de demanda en sus destinos tradicionales de la Unión Europea. En este último escenario, EEUU se convirtió en el principal importador del azulejo. Ahora, cuando encaraba una recuperación se ha encontrado con el envite de los aranceles anunciados por Donald Trump. Esta agresiva política proteccionista añade otra preocupación, pero el sector confía en aplacar su exposición por su amplia diversificación internacional, una red trabajada durante dos décadas y que alcanza los 180 países.
Empresas del azulejo consultadas por este diario apuntan que Estados Unidos mejoró su posición en las exportaciones españolas mientras la demanda europea se estancaba. Así, esperan que los amplios canales de ventas de la industria cerámica -que abarcan 180 países de todos los continentes- y un repunte de otros mercados mitiguen el impacto de la guerra arancelaria. Recuerdan que las medidas proteccionistas se dirigen a todo el mundo y que, incluso, son superiores en países competidores como la India.
Las mismas fuentes resaltan que tanto las grandes como las pequeñas fábricas afrontan el momento estando muy internacionalizadas y con presencia en un gran número de mercados. Su principal nicho, según datos de 2024, es la Unión Europea, con un 40%, que asciende al 50,1% si se suman países del viejo continente que no forman parte de la zona Euro, como pueden ser estados del este o el Reino Unido. También destacan Oriente Medio, con un 11,5% de cuota; Asia, con un 14,5%; y África, con un 9,7%. Luego, América Central y América del Sur concentran un 6,9% y Canadà un 2,7%.
Por su parte, Estados Unidos tiene un peso considerable con un 13% de las exportaciones del azulejo español tras crecer un 3% en 2024. En la anterior anualidad, las transacciones de baldosas en el exterior continuaron bajando a nivel global pero menos de lo esperado, situándose el descenso en un 2,4%. Además, la industria comenzó una recuperación en su producción el pasado año, en el que cerró su ejercio más rentable, subiendo su Ebitda hasta los 924 millones de euros.
A la vista de ello, desde la industria subrayan que esperan que Trump recule con los aranceles, al menos en productos en los que EEUU no tiene capacidad para atender su demanda, como el azulejo, y de hecho, este mismo miércoles la Casa Blanca rectificó y dejó en suspenso los aranceles masivos, quedando sin efecto durante 90 días el 20% en los productos europeos, manteniéndose el 10%. Pero mientras tanto, el clúster castellonense ya mira cómo potenciar otros mercados en los que tienen presencia, siendo el principal objetivo la reactivación de las ventas en países destacados de la UE que experimentaron una contracción en los últimos años como Francia y Alemania.
Cláusulas espejo para las importaciones de la India
No obstante, desde el azulejo también advierten que es muy complicado sustituir el 13% que representa Estados Unidos a otros lugares, al tiempo que alertan del incremento de los envíos de países competidores que introducen sus baldosas con precios más bajos al tener costes sociales y ambientales más reducidos que en Europa. Al respecto, desde hace tiempo Ascer defiende la aplicación por parte de la UE de cláusulas espejo a los productos de fuera que no se rijan por la misma legislación ambiental y laboral, como sucede con la India. De esta forma, este país pagaría una diferencia y se lograría unas relaciones comerciales más justas.
Siguiendo con la India, también hay inquietud sobre un posible trasvase de exportaciones de este territorio de EEUU a Europa al prever un arancel del 26%.
Sea como fuere, hay que esperar a ver cómo evoluciona la guerra arancelaria ante los continuos bandazos del presidente de Estados Unidos. El azulejo ya sufrió la paralización de los primeros pedidos cuando se anunció el 20%, que se podrían activar en los 90 días en los que queda congelado este porcentaje.
La semana pasada, Ascer trasladó prudencia, aunque calificó los aranceles de "negativos para el comercio y sobre todo para los ciudadanos del país que los aplica".