VILA-REAL. El patronato de la Fundación Pro Monasterio y Basílica de Sant Pasqual, presidido por el alcalde de Vila-real, José Benlloch, se ha reunido este miércoles para aprobar las cuentas anuales y hacer balance de la gestión durante el último año, marcado por una pandemia que ha afectado en buena parte a las actividades previstas inicialmente para la promoción cultural y turística de la basílica del patrón de la ciudad.
Pese a las circunstancias adversas a las que se ha tenido que hacer frente por la covid, no han impedido que se haya trabajado en las obras de mejora del templo, tal como ha explicado Benlloch tras la reunión.
Al encuentro, como viene siendo habitual, han asistido también el presidente de la Diputación de Castellón, José Martí, junto a los representantes del resto de instituciones que conforman el patronato.
El patronato ha dado a conocer las últimas actuaciones, como la construcción de la nueva puerta de acceso, coro y nártex, además de las donaciones de particulares y empresas. De manera especial, el alcalde ha agradecido la donación de los bancos de la basílica por parte de Pascual Ibáñez y familia, así como de los trabajadores de la empresa Insca para hacer posible la renovación del mobiliario interior del templo.
Benlloch también ha destacado el apoyo de la Fundación José Soriano Ramos, así como de la Fundación José Gómez Mata, que ha sufragado la restauración y puesta a punto de las campanas y carillón. Del mismo modo, el presidente del patronato ha puesto de relevancia la implicación del Ayuntamiento de Vila-real y la Diputación de Castellón para hacer posible actuaciones a la basílica por valor de más de 300.000 euros en los últimos tres años. Finalmente, el alcalde ha anunciado que la fundación prepara ya la reanudación de las actividades de promoción de la basílica como recurso turístico, a través de las visitas; eso sí, esto será en el momento en que la evolución de la pandemia lo permita.