CASTELLÓ. Podem-EUPV estira la cuerda en el Acord de Fadrell para no perder cuota de poder ante el PSPV. La confluencia supedita su apoyo al presupuesto a que el principal socio del gobierno municipal ceda "músculo administrativo" en favor de la Concejalía de Transición Ecológica, liderada por Fernando Navarro. De esa exigencia subyace la necesidad de marcar terreno en el tira y afloja, como en su momento ocurrió con Compromís, cuando se produjo el desacord a raíz de su posición sobre las fiestas en el último pleno de 2019.
Según desvela el propio concejal, la reestructuración de la Relación de Puestos de Trabajo (RPT) en el Ayuntamiento de Castelló forma parte de los compromisos adquiridos durante la negociación de junio para decidir el reparto de las competencias entre los tres partidos.
Esa reorganización funcionarial debió concretarse incluso antes de abordar las cuentas para el presente ejercicio. "En noviembre planteamos esos cambios, pero el desacord lo paró. En febrero se retomó y la crisis por el covid-19 lo volvió a frenar. Ahora nuevamente se propone y por tercera vez", explica Navarro.
"Lo que no puede ser es que no exista ninguna unidad administrativa para Transición Ecológica", advierte su titular, que directamente apunta al área de Ordenación del Territorio, que dirige el socialista Rafa Simó, como responsable de que ese reajuste siga pendiente. Así, asegura que muchos de los proyectos que dependen de su parcela son asumidos por los técnicos del departamento del edil del PSPV. "Entonces se trata de sacar a unos funcionarios de un sitio para llevarlos a otro y, así, potenciar una parcela a largo plazo", subraya.
"Al final es una decisión política. No se había hecho público hasta ahora, porque es más una cuestión burocrática que informativa", prosigue Navarro, quien insiste en pedir la modificación de la RPT para que Podem-EUPV acepte el nuevo presupuesto. "Si se produce ese gesto, su aprobación será una cuestión inminente", reitera.
En este punto, el líder morado se muestra optimista respecto a alcanzar un entente en los próximos días. Es más, descarta que las divergencias de matices entre ambas formaciones pongan en peligro el Fadrell. "Todos somos conscientes de que hay que hacer un esfuerzo", afirma.
En el fondo, Podem reclama que, de alguna forma, el PSPV le devuelva el gesto que tuvo por su papel en la crisis de diciembre. La confluencia siempre apostó por rebajar la tensión entre los socios asumiendo un rol conciliador y sin salirse del guión de la lealtad institucional. En consecuencia, espera ahora un guiño del Partido Socialista, aunque fuentes del gobierno aseguran que por encima de intereses partidistas está la aprobación del presupuesto, que se considera "prioritario" ante la covid-19.