CASTELLÓ. Los años de reivindicaciones han dado por fin sus frutos para las enfermeras y enfermeros de la Atención Primaria valenciana. La Conselleria de Sanidad ha establecido, al fin, un cupo específico para el personal de enfermería -que hasta ahora no tenía-, y ha fijado en 1.500 el número máximo de pacientes que se le asignará a cada profesional sanitario. Es decir, cada enfermero o enfermera que trabaja en los centros de asistencia sanitaria esencial tendrá una población asignada, que estará por debajo de esta cifra, tal y como ocurre en el caso de Medicina Familiar donde cada facultativo tiene adjudicado un número concreto de pacientes, y responde de ellos.
En el caso de la provincia de Castellón, hasta 472 facultativos que trabajan en la Atención Primaria se verán beneficiados con la introducción de este cupo. En concreto, alrededor de 100 enfermeras del Departament de Salut de Vinaròs, cerca de 132 del de La Plana y unas 240 enfermeras que trabajan en los distintos centros de salud pertenecientes al Departament de Salut de Castelló.
Con esta nueva medida, que será efectiva a partir de este mismo jueves, el área que dirige Miguel Mínguez da respuesta a una demanda histórica del personal de enfermería que trabaja en los consultorios y centros de salud de la Comunitat Valenciana. De hecho, el sindicato mayoritario entre las enfermeras y enfermeros, Satse, llevaba "más de cinco años" reivindicando esta regulación ya que, según explican, "en muchas ocasiones una misma enfermera tenía hasta 3.000 pacientes asignados y esto desencadenaba en una situación de saturación para los profesionales sanitarios, que no daban a basto".
Por su parte, el Colegio de Enfermeros y Enfermeras de Castellón también ha celebrado esta iniciativa de la Conselleria de Sanidad. "Nos mostramos satisfechos ante la aplicación de estos cupos, ya que era una demanda de la profesión desde hace tiempo. Esto supone que se ponga en valor el papel de la Enfermería dentro del sistema sanitario, así como en Atención Primaria y nos dota de una autonomía que reiteradamente habíamos solicitado" explica a este diario el presidente del Colegio Oficial de Enfermeros y Enfermeras de Castellón, Francisco Pareja.
Y es que hasta ahora, el personal de Enfermería no contaba con un cupo poblacional propio, sino que se acoplaba al del médico de familia con el que trabajaba puesto que este sí disponía de uno. De esta forma, si una enfermera o enfermero hacía tándem con dos facultativos debía asumir la población asignada a ambos y esto, tal y como indican fuentes sindicales "suponía una carga enorme de trabajo para el sanitario que desencadenaba en una disminución de la calidad de la asistencia, ya que en su jornada laboral no podía llegar a atender a todos los pacientes que se le asignaban".
Según ha explicado la Conselleria de Sanidad en un comunicado, la introducción de estos cupos significa que una misma enfermera acompañará a los pacientes que tenga asignados a lo largo de todas las etapas de su vida, tal y como ocurre con Medicina de Familia. Asimismo, el personal de Enfermería podrá desarrollar actividades de prevención y promoción de la salud comunitaria "ajustadas a las singularidades de la población que tenga asignada". En cualquier caso, si por algún motivo, el o la paciente está en desacuerdo con el recurso de Enfermería asignado podrá solicitar el cambio, esta posibilidad de libre elección se mantiene.
Pese a que desde el Sindicato de Enfermería ven esta medida como "un primer logro" y una forma de igualar las condiciones laborales de las enfermeras de Atención Primaria a las de los facultativos de Medicina Familiar, son conscientes de que esta regulación no beneficiará por igual a todos los enfermeros y enfermeras. Según apunta el secretario de acción sindical de Castellón, Francis Centelles, "según en el departamento de salud en el que se trabaje la carga de trabajo será mayor o menor ya que la presión asistencial varía según la edad de población".
"En los centros de salud de municipios del interior, por ejemplo, por norma general la población está mucho más envejecida y necesitan más atención sanitaria, por esta razón una enfermera que trabaje en este tipo de ambulatorio va tener, por ende, más carga que una que trabaje en un centro de salud dónde no viva tanta gente mayor", explica. Es por esta razón que desde el Satse van a continuar luchando para que estos ratios "continúen bajando" y se tenga en cuenta la situación específica de cada departamento de salud.