VALÈNCIA. La campaña navideña concentra cada año uno de los mayores picos de contratación temporal en España, especialmente en logística, comercio y hostelería, que acaparan cerca del 40% de los contratos de la temporada, según datos de la patronal de las agencias de empleo y empresas de trabajo temporal Asempleo.
Este repunte de la actividad se traduce en una mayor demanda de perfiles vinculados al refuerzo de plantillas durante las semanas de mayor consumo. En concreto, la consultora de empleo Randstad identifica diez puestos como los más demandados esta Navidad en España: mozo de almacén, preparador de pedidos, repartidor, dependiente de tienda, camarero, promotor comercial, carretillero, ayudante de cocina, personal de atención al cliente y empaquetador de regalos.
Este refuerzo estacional explica también por qué la campaña navideña sigue siendo una de las principales puertas de entrada al mercado laboral: “La estacionalidad ofrece oportunidades laborales para colectivos con problemas de empleabilidad, en busca de su primera inserción o que están retornando al mercado, como los jóvenes, los más mayores o con carencias formativas ”, señaló Lorenzo Serrano, investigador del IVIE y catedrático de la Universitat de València.
En el ámbito autonómico, las Estadísticas de Contratación Registrada de Labora confirman este patrón. En diciembre de 2024, el sector servicios concentró la mayor parte de las contrataciones en la Comunitat Valenciana, con un total de 74.659 contratos. Además, el empleo temporal volvió a imponerse al indefinido, con unos 16.400 contratos más, afirmando la “fuerte estacionalidad a lo largo del año del mercado de trabajo”, tal y como explicó Serrano.
No obstante, el catedrático de la Universitat de València apuntó también a una tendencia hacia una “mayor estabilidad laboral”, con un “mayor recurso” a los contratos fijos, aunque advirtió de ciertos “síntomas de agotamiento, con una caída de la contratación fija discontinua respecto al mes de noviembre”.
Por grupo de ocupación destacan los 35.418 contratos de las ocupaciones elementales, donde se encuadran perfiles como mozos de almacén y empaquetadores, fundamentales en la campaña navideña por su papel en la carga, descarga, clasificación de mercancías y preparación de pedidos en un contexto de fuerte crecimiento de las ventas online.
Tras las ocupaciones elementales se sitúan los trabajadores de comercio y hostelería, es decir, dependientes de tiendas, camareros y ayudantes de cocina. Durante el mes de diciembre de 2024 se firmaron en la Comunitat Valenciana un total de 28.881 contratos, casi 3.000 más que en noviembre, a medida que las tiendas físicas, bares y restaurantes refuerzan sus plantillas ante el aumento de la afluencia de personas durante estas fechas.
Por detrás se encuentran los operadores de instalaciones y maquinaria — como repartidores y carretilleros — y los empleados contables y de atención al cliente. Aunque se trata de los grupos con menor peso en la campaña navideña, ambos superan los 5.000 contratos en diciembre, con incremento significativo respecto a noviembre, cuando se situaban en torno a los 9.000 contratos en conjunto.
La Comunitat Valenciana se alinea con la evolución nacional
Las previsiones apuntan a que la campaña navideña mantendrá su dinamismo en los próximos meses. La Navidad de 2025 generará en España cerca de medio millón de contratos, un 4,7% más que el año anterior, según las estimaciones de Randstad. En la Comunitat Valenciana, el comportamiento previsto está alineado con la evolución media nacional, con un crecimiento similar y una media de 47.335 contratos durante el periodo comprendido entre Black Friday y las rebajas de enero.
Por sectores, la hostelería será la actividad con mayor crecimiento (12,4% más), impulsada por la necesidad de reforzar plantillas ante los picos de trabajo, seguida del comercio (12,1% más), que volverá a demandar dependientes y personal de ventas. En cambio, el transporte y la logística, mostrarán una evolución más moderada tras el fuerte impulso registrado en campañas anteriores, con un 6,8% menos.
En este contexto, Lorenzo Serrano subrayó que el mercado de trabajo español continúa marcado por una fuerte estacionalidad, “en buena medida inevitable dada la especialización productiva de la economía española”. Aunque este modelo facilita la entrada al empleo de colectivos como jóvenes, trabajadores de más edad o personas con carencias formativas, también tiene “efectos negativos” sobre la productividad, al limitar la “adquisición de experiencia" y reducir "el atractivo de la inversión en formación”.