CASTELLÓ. El Gobierno retrasa a 2025 una de las grandes obras pendientes en la provincia, la de la plataforma por la que debe circular el AVE entre València y Castelló y que permitirá unir la capital de la Plana con el resto del Corredor y la línea desde Madrid en alta velocidad real. Esta es una de las noticias que deja la presentación de los Presupuestos Generales del Estado en el Congreso de los Diputados en lo que se refiere a las comarcas castellonenses.
Así, mientras en el proyecto anterior, el de 2021, se preveía que los trabajos para materializar la plataforma ferroviaria independiente en ancho UIC entre la capital autonómica y la de la Plana pudieran comenzar en 2023 gracias a una inversión de 6,6 millones de euros, ahora este importe se retrasa dos años. Y eso si ese dinero sirve para ejecutar la obra, ya que para 2024 solo consigna 600.000 euros, lo que daría para redactar el proyecto constructivo de una infraestructura de la que aún no se conoce el estudio informativo, que comenzó a redactarse en la primavera de 2018 y hace año y medio que debería estar concluido.
El retraso en esta plataforma AVE, para la que se prevé invertir 702 millones de euros y cuya ejecución se prolongará durante muchos años, se produce a pesar de que la Comisión Europea ha alertado del posible cuello de botella que puede producirse en la línea férrea entre València y Castelló.
En lo que se refiere a la actuación en la línea actual, y aunque los PGE no recogen el proyecto desvinculado de los trabajos de València a Castelló, en las cuentas aparece que en 2022 comenzará el grueso de la obra para convertir al ancho internacional el trazado hasta Vandellós. Y es que los 77 millones incluidos como partida para Adif Alta Velocidad solo pueden suponer el inicio de estos trabajos, todavía pendientes.
Eso sí, estos 77 millones son bastantes menos de los que los PGE del año pasado preveían para este año y el próximo. Y es que el anterior proyecto recogía, solo para 2021, una inversión de 118,6 millones de euros -y otros 15 para 2022- y las cuentas presentadas este miércoles señalan que la inversión con la que finalizará este año es de 23,5 millones.
En cuanto al acceso sur al puerto, para el año próximo los PGE prevén materializar 15 millones de euros, el mismo montante que ya aparecía consignado hace un año para 2022, con la diferencia de que esta obra aún no ha podido comenzar, al contrario de lo que las cuentas estatales consideraban doce meses atrás, y no parece claro que pueda hacerlo todavía.
A falta de resolver los problemas que acumula esta infraestructura, para la dotación ferroviaria interna de PortCastelló los PGE estiman una inversión de 12,5 millones. Cuatro y medio son para la primera fase de la dársena sur, más económica y para la que ya hay propuesta de adjudicación, como ha adelantado Castellón Plaza. Los otros ocho son para el puente ferroviario, que todavía debe ser licitado de nuevo, con lo que habrá que ver si es posible materializar tal inversión.
Asimismo, la Autoridad Portuaria de Castellón prevé iniciar la remodelación del muelle transversal exterior, una obra para la que prevé destinar 3,8 millones de euros. En total, PortCastelló plantea materializar 24 millones de euros en diferentes inversiones, mientras este año se han quedado en el aire 5 millones debido al retraso en varias actuaciones.
En materia hídrica, las cuentas estatales prevén aportar 2,7 millones para la finalización de la balsa del río Belcaire, en la Vall d'Uixó, un proyecto que arrancó en 2005 y que a día de hoy no es totalmente operativo. Asimismo, los PGE vuelven a recoger el millón de euros para el depósito de regulación de la desaladora de Oropesa, una obra que vienen arrastrando repetidos proyectos presupuestarios.
También se retrasan, en este caso hasta 2023, las inversiones para sumar beneficiarios a las desaladoras de Oropesa y Moncofa. Así, los cuatro millones que, a medias, preveían los presupuestos de 2021 para conectar ambas plantas con nuevos usuarios quedan ahora pospuestos un año más. Lo que sí prevén los PGE es acabar de pagar la desaladora de Oropesa el próximo año gracias a una dotación de 1,8 millones de euros.
En cuanto a otras inversiones, la reforma de la prisión Castellón I, para la que Instituciones Penitenciarias adjudicó la redacción del proyecto en mayo, tardará varios años en quedar materializada. Así, para este año solo se prevé precisamente la redacción del proyecto y para el próximo una inversión de 200.000 euros. Entre 2023 (820.000 euros) y 2024 (1,25 millones) quedará finiquitada esta primera reforma de un centro que entró en servicio en 1986 y acumula deficiencias.
En total, en cuanto a las inversiones territorializadas, los PGE señalan que corresponde a Castellón una inversión de 148,2 millones de euros, entre los nuevos proyectos y los ya iniciados. Un año antes la cifra que recogía este punto de las cuentas para la provincia era de 204,4 millones. Y ello a pesar de que, según ha informado este miércoles, a la Comunitat llegará un 3,7% más de fondos. De todas formas, el retraso en las infraestructuras tampoco es una novedad de este año.