CASTELLÓN. Eurowings ha renunciado a volar a Castellón a pesar de que era la única de las tres compañías que habían optado a la primera fase del plan de posicionamiento del aeropuerto castellonense que iba a recibir la subvención máxima: 400.000 euros. Concretamente, la aerolínea alemana, que en su día presentó una propuesta para unir el aeródromo de Benlloc y Vilanova d'Alcolea con el de Colonia-Bonn, ha desistido de esta posibilidad, al contrario de Wizz Air, que sí concretó su oferta para unir Castellón y Bucarest, por la que percibirá un máximo de 360.000 euros.
La compañía húngara recibirá este montante tope en base a un fijo de 144.000 euros anuales a los que habría que sumar 27,15 euros por cada pasajero que llegue a Castellón en sus aviones. Tanto el fijo como el importe variable son menores a lo que iba a cobrar Eurowings (160.000 y 34,48 euros por turista que fuese a aterrizar en la provincia). Además, la compañía germana lo iba a recibir por operar durante las 29 semanas de la temporada de verano, lo que en principio le podría garantizar una buena ocupación de sus aviones, al contrario que Wizz Air, que volará durante todo el año.
Por esta razón, parece complicado que Eurowings vaya a responder a la invitación de Aerocas de presentar nuevas ofertas en esta primera fase del plan de posicionamiento del recinto. Y es que la promotora del aeropuerto castellonense ha remitido ya una carta a esta compañía, Wizz Air y Ryanair para que presenten nuevas propuestas en la primera fase del plan, han confirmado a este diario fuentes de la compañía pública de la Generalitat.
Este procedimiento negociado es una posibilidad que permite la ley de contratos del sector público. Dado que Ryanair y Wizz Air presentaron ofertas al mismo lote (el cuarto), no se puede adjudicar a ninguna de ellas la vacante de Eurowings. Ante ello, el procedimiento marca que se debe abrir un plazo para presentar ofertas a los tres lotes que han quedado desiertos (dos ellos no recibieron ninguna propuesta).
De esta manera, ahora las compañías aéreas disponen de 15 días para presentar nuevas posibles conexiones en esos tres lotes: destinos consolidados durante la temporada de verano y todo el año; y destinos emergentes durante la campaña estival. Tras ello, las fuentes de Aerocas señalan que hacia "finales de febrero" acabará el proceso, ya sea con el anuncio de nuevas rutas o sin que los 1,2 millones a los que optan las aerolíneas queden sin dueño.
Posteriormente, "en marzo" prevén en Aerocas, saldrá a licitación la segunda fase del plan de posicionamiento del recinto, que tendrá una duración de tres años a raíz de dos millones de euros anuales. De momento, en Aerocas trabajan en los pliegos para definir los destinos y también si en esta fase habrá un montante para garantizar la continuidad de las rutas actuales, de forma que se pueda frenar la sangría de conexiones que están dejando de operar en el recinto.
Esto favorecería a Ryanair, mayoritaria en el aeropuerto de Castellón; y permitiría a Blue Air competir en términos similares con Wizz Air, dado que la primera no recibe ninguna subvención por realizar el mismo trayecto que esta última.
El presidente de la Generalitat, Ximo Puig, se ha referido a la "cuestión compleja" que supone "intentar relanzar el aeropuerto" y ha señalado que el aeródromo castellonense está "trabajando mucho para que sea realidad el vuelo Castellón-Madrid, y ese es el camino, el de la profesionalidad, de hacer las cosas bien y de intentar no repetir los errores del pasado".