Garrido habla con Navarro antes de intervenir en el pleno. Fotos: ANTONIO PRADASCASTELLÓ. María Jesús Garrido, concejala de Vivienda e integrante de la confluencia Podem-CSeM-EUPV, nunca olvidará su primera participación en una sesión ordinaria del Ayuntamiento de Castelló. Su intervención, para contestar a una pregunta formulada por la portavoz del PP, Begoña Carrasco, acerca de su área, ha incendiado el pleno de este jueves. En apenas tres minutos y 22 segundos se ha convertido en la gran protagonista. Su alocución, además de coger por sorpresa incluso a su propio compañero de partido, Fernando Navarro, ha causado un gran revuelo entre los miembros del equipo de gobierno y ediles de la oposición al hablar de cómo se encontró su concejalía y los múltiples conflictos que existen actualmente con los alquileres sociales.
"Hasta ahora no se había hecho nada, no en la anterior legislatura (en alusión a su antecesora, Ali Brancal), sino mucho más allá. No se ha hecho nada en vivienda y con eso es lo que nos hemos encontrado esta concejala y su equipo. Estamos asegurando que las viviendas que hay estén utilizadas correctamente, que en este momento no lo es. No se sabe que nadie haya hecho ese trabajo anteriormente.", ha afirmado.
Garrido se ha ido metiendo poco a poco en un jardín, del que no ha sabido salir. "No sabemos si los que están en las viviendas se corresponden con el contrato de alquiler que hubo en su momento, quién está en esas viviendas y que es la persona que está autorizada a vivir ahí".
En este preciso instante, la concejala ha dejado a los presentes enajenados al asegurar que "hay muchos conflictos en los pisos sociales. Ya hemos puesto cartas en el asunto a través de la Policía Local, y esperamos que desde la Policía Nacional si fuera necesario también, para erradicar, sobre todo, la droga que se vende en viviendas sociales".
Garrido ha concluido su exposición incidiendo en la situación de partida con su llegada al departamento. "Reconocemos que vamos tan deprisa como podemos dada la inacción que tenía esta concejalía, inexistente en otro momento pero existente en la anterior legislatura". Seguidamente ha avanzado que en octubre se publicará el Plan de Vivienda por un importe de 1,9 millones de euros y que las convocatorias para las ayudas de alquiler de 2019 han superado las mejores expectativas, teniendo en cuenta los precedentes de otros años, al interesarse en ellas más de 300 personas.
Estos dos últimos anuncios, siendo importantes, han pasado completamente a un segundo plano después de desvelar que la Policía Nacional, a instancias del Ayuntamiento de Castelló después de recibir varias quejas vecinales, ha iniciado una investigación sobre el posible tráfico y venta de estupefacientes en algunos de los inmuebles reservados al alquiler social.
El parque municipal de pisos destinados a ayudar a las familias con menos recursos está compuesto por 221 viviendas propiedad del consistorio y otras cinco cedidas en alquiler. Según ha informado posteriormente Garrido, la pesquisa policial se centra en uno de los inmuebles, aunque no ha aclarado si la actuación corresponde a una denuncia reciente o viene de atrás, del anterior mandato.
La tormenta que ha desencadenado la intervención de Garrido ha obligado más tarde al portavoz del gobierno, Rafa Simó, a suavizar y matizar parte de las declaraciones, especialmente aquellas referidas a Brancal. "Hay que diferenciar entre que no se hayan conseguido los resultados deseados a que no se haya hecho nada hasta ahora. En vivienda se ha currado, y mucho, desde la pasada legislatura. Lo que ocurre es que se trata de una concejalía complicada y oscura".
"Hay que recordar que, cuando llegamos al gobierno, el desastre patrimonial era importante. Es verdad que se han hecho muchas gestiones para regularizar los inmuebles, pero también lo es que no hemos obtenido los frutos esperados", ha subrayado.
Brancal impulsó en octubre de 2017 las ayudas a la vivienda para personas en situaciones de emergencia social y con problemas de exclusión residencial. Del mismo modo, puso orden al parque de inmuebles municipales, creando un censo oficial, medida que permitió después activar Jornals de Vila para proceder a la rehabilitación de aquellos pisos con deficiencias estructurales y técnicas.
