CASTELLÓ. Albert Fernández dirigirá durante los próximos cuatro años la federación provincial de Comisiones Obreras. Y lo hará con una comisión ejecutiva totalmente renovada: sus siete integrantes (Lidón Calvo, Alejandro Molina, Electra Añó, Sebastián Pulido, Raquel Coll, Jorge Sirvent y Lola Tajahuerce) entran por primera vez en el órgano directivo.
Así lo decidieron, sin ningún voto en contra en la elección de Fernández, los 121 delegados que este martes participaron en el congreso de CCOO Comarques del Nord en el Teatre del Raval de Castelló. Con ello, el secretario general es elegido por primera vez después de tomar el relevo de Manel Nieto hace ahora poco más de un año.
La renovación de la comisión ejecutiva responde a la voluntad de que "entre gente joven y nueva", señala Fernández, y también debido a las incompatibilidades para ostentar cargos en las diferentes ejecutivas, la provincial y las sectoriales, indica. Además, "es una forma de decir que vamos a cambiar la política interna y a coordinarla con las federaciones", apunta.
En un momento en que CCOO ha sumado ligeramente afiliación pese a la incidencia de la pandemia, su secretario general en la provincia no se marca como un objetivo prioritario recortar la ventaja en la representatividad que en la provincia tiene UGT, sino que pretende incidir, de forma conjunta con este sindicato, en "la política de reivindicación de la clase trabajadora", con aspectos claves como el salario mínimo, las pensiones o la financiación autonómica. Todo con el objetivo de que la gente "tenga una vida digna".
Entre los retos concretos, califica de "vital" poner fin a la agonía de los trabajadores de la hostelería, tras más de siete años sin convenio. "Se acaba de constituir la mesa negociadora, a ver si evoluciona bien y conseguimos un texto bueno, porque es un sector con mucha precariedad y contratación incluso fraudulenta".