Apoteosis amarilla en las calles de Vila-real. (Fotos: Antonio Pradas/Toni Losas)
Apoteosis amarilla en las calles de Vila-real. (Fotos: Antonio Pradas/Toni Losas)
VILA-REAL (EFE). La Liga Europa conseguida este miércoles por el Villarreal ante el Manchester United llega a las vitrinas del club español con un envoltorio de treinta millones de euros, los que ingresa el club de la Plana a raíz de su participación en el torneo, el título logrado y la disputa de la próxima Supercopa de Europa, a la que da derecho.
Al margen de lo que supone el título para el club que preside Fernando Roig, que representa a una ciudad de poco más de 51.000 habitantes, este ingreso supone además un porcentaje de ingresos muy importante respecto a los 140 millones que ha presupuestado la entidad para esta temporada.
Con estos treinta millones, el club se garantiza acabar la campaña con un balance equilibrado de ingresos y gastos, circunstancia que de no haberse producido podría haber obligado a la entidad a vender a algún jugador importante para equilibrar cuentas.
Antes de la final, el club trabajaba en la necesidad de compensar las ganancias de la Conference League, que son menores que las de la Liga Europa, de cara a la nueva situación de la entidad, pero el escenario ha cambiado con la obtención del título en Gdansk. La victoria en la final, acompañada de la disputa de la Supercopa en agosto y de la clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones ha modificado el panorama más allá de los más de 7 millones de ingreso logrados a raíz del título, que han pasado a convertir los 23 asegurados antes del encuentro en los 30 ratificados.
Además, el nuevo escenario en el primer torneo continental ha propiciado, tal y como ha considerado su presidente, Fernando Roig, "un salto brutal y muy importante" para la entidad.
Esta nueva realidad supone una inyección económica que abre al Villarreal la opción de dar un paso más a la hora de reforzar al equipo, ya que le permitirá poder mantener a sus jugadores clave y disponer de dinero para destinar a nuevas incorporaciones.
Nombres como los de Pau Torres, Alfonso Pedraza o Gerard Moreno estaban antes de la final sobre la mesa dado el interés de otros clubes y ante la necesidad de que el equipo amarillo necesitara ajustar su presupuesto. Pero con el título y el panorama de la próxima campaña, la perspectiva ha variado.
El club ya apostó fuerte esta temporada con fichajes como los de Pervis Estupiñán (15 millones), Gero Rulli (6), Francis Coquelin (8), Dani Parejo (que llegó sin coste pero con una ficha elevada) y Étienne Capoue (2 millones).
A ello se deben añadir los esfuerzos de la campaña pasada en la que se pagaron 25 millones por Paco Alcácer, 8 por Rubén Peña, 7,5 millones por Javier Ontiveros, 4 por Raúl Albiol y 1,3 millones por Moi Gómez.
Con esta inyección económica el equipo puede acudir al mercado con un remanente para poder afrontar un gasto mayor para mejorar su equipo de cara a las exigencias de la campaña 2021-2022
Apoteosis amarilla en las calles de Vila-real. (Fotos: Antonio Pradas/Toni Losas)