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el castellonense ganó en 2018 el Campeonato del Mundo de Carrera Descalcista en oropesa

Xavier Gil o el arte de correr descalzo

13/05/2021 - 

CASTELLÓ. A lo largo de la historia muchos atletas se han despojado de sus zapatillas para competir en carreras de larga distancia (y no tan largas), suprimiendo así lo que se considera un complemento básico para correr. Los ejemplos son muchos, desde Abebe Bikila, que en los Juegos Olímpicos de 1960 se colgó el oro en Roma tras recorrer 42 kilómetros descalzo y que, además, estableció el entonces récord mundial de maratón en 2 horas, 15 minutos y 16 segundos, hasta Douae Ouboukir, la atleta marroquí que ganó el Campeonato de Cataluña de cros celebrado el pasado febrero en Santa Cristina d'Aro. 

Esta tendencia ha calado entre muchos aficionados al running, hasta el punto de que cada vez es más habitual ver atletas populares descalzos por las ciudades e incluso en carreras de montaña.

Entre ellos está el castellonense Xavier Gil, de 28 años, que no solo corre descalzo, sino que puede presumir de que ganó la primera edición del Campeonato del Mundo de Carrera Descalcista que se celebró en Oropesa del Mar en 2018, aunque él le resta importancia: "Era un encuentro entre descalcistas pero no era oficial. Mundial no fue mucho porque casi todos éramos españoles... había alguno de fuera. Eso fue hace tres años y al año siguiente se hizo otra vez. La primera sí que gané y la segunda quedé tercero".

Remedio contra el dolor

Xavier probó suerte con el descalcismo, allá por 2016, para reducir el dolor que sentía al correr. Las dolencias en sus tibias fueron lo suficientemente importantes como para tirarse a la piscina y quitarse las zapatillas. Y le funcionó. 

"Cuando corría calzado me dolía el tibial, tenía muchas molestias. El entrenador me decía que ya me acostumbraría, pero yo no lo tenía muy claro. Luego me informé, investigué y me topé con el descalcismo. Pensé, venga, voy a probar, y ahora ya llevo cinco años".

Fotos: Carlos Pascual

Desde entonces, solo se ha vuelto a calzar durante el confinamiento y, tras dos meses, los dolores emergieron de nuevo. Fue la prueba definitiva de que lo suyo es ir descalzo. 

"En el confinamiento estuve corriendo con zapatillas durante dos meses y ya me empezaron a doler las rodillas. Al quitármelas, el dolor desapareció. Yo no tengo suficiente información científica acerca de ello, pero en cuanto a sensaciones personales, creo que las articulaciones de cadera y rodilla sufren menos", explica Gil, que también señala la clara desventaja de correr descalzo: la preparación previa que los pies necesitan para que se curtan.  

"No hay ninguna necesidad de sufrir"

Y es que el de la Plana trabajó para acondicionarse los pies durante mucho tiempo, una tarea tediosa pero necesaria, aunque Xavier defiende que, en su caso, todo fue "bastante cómodo". "Creo que lo hice bien dentro de las posibilidades. Empecé caminando descalzo durante dos meses, y luego ya comencé a correr, pero distancias muy cortas, no más de un kilómetro. Para correr descalzo no hay ninguna necesidad de sufrir. Puedes ir aumentando de nivel conforme te lo permitan los pies", aclara. 

Un sufrimiento que a priori, desde fuera, se percibe evidente. Tanto si se corre por asfalto, como por montaña, con todo tipo de obstáculos e incluso piedras sueltas y rocas grandes. A pesar de ello, esta es una modalidad que Xavier practica con frecuencia y acompañado por un grupo de amigos... que en su caso van habitualmente calzados.

Por eso la pregunta es obvia: ¿Cómo correr descalzo y más sobre ciertas superficies? Él lo resume todo en cuánto y cómo te hayas preparado: "El cuerpo te aguanta lo que lo hayas entrenado", comenta entre risas antes de asegurar que a él ya no le duelen los pies porque lleva bastante tiempo pisando piedras. 

En cuanto a la técnica, Gil cree que "no es diferente". "No creo que correr descalzo tenga una técnica específica, pero sí te ayuda a conseguir que sea la correcta. Aunque no todos los descalcistas tienen una buena técnica. Lo que sí veo es que hay mucho corredor popular, calzado, que corre bastante mal, y eso es más raro de ver en los descalcistas. Que también los hay, pero en parte te ayuda a mejorar la forma de correr", finaliza este peculiar atleta castellonense. 

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