Castelló liquida el sector de la cuadra Salera: divide los 26.806 m2 en 'miniunidades' para su desarrollo

CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló por fin culmina la liquidación de la Unidad de Ejecución 32 UE-R, lo que se conoce como Cuadra Salera, un sector de 26.806 metros cuadrados ubicado en el entorno del centro Urban. Lo hace tras más de dos años de tramitación administrativa después de que en junio 2020 la Junta de Gobierno Local atendiera la petición de los propietarios, que habían solicitado cancelar la urbanización por su inviabilidad económica.

La anulación del Programa de Actuación Integrada permite trocear la amplia superficie "en pequeñas unidades", según explica el portavoz del Fadrell y concejal de Urbanismo, José Luis López. Esa subdivisión garantiza un desarrollo más ordenado, sostenible y coherente, de acuerdo con lo que establece el Plan General (PG). El consistorio se asegura, además, alrededor de 14.000 metros cuadrados de uso residencial. De esa cantidad, 10% se empleará a futuras Viviendas de Protección Pública (VPP). Asimismo, aumentan la zona dotacional y los espacios ajardinados, con un nuevo diseño de las manzanas edificables y la disposición del trazado viario.

Aval bancario e hipoteca

La eliminación definitiva de la 32 UE-R se produce tras aceptar parcialmente las últimas alegaciones presentadas por seis de los titulares de los terrenos, si bien es cierto que la inmensa mayoría pertenece a la inmobiliaria Solvia. Los afectados reclamaban que el Ayuntamiento asumiera la indemnización de los avales bancarios y las costas derivadas del proceso judicial a raíz de iniciar la citada liquidación.

Sin embargo, según el acuerdo de la Junta de Gobierno Local, solo se contempla la devolución de los gastos de formalización y cancelación de la hipoteca con la entidad BBVA, cuyo importe asciende a 9.250,63 euros. Esa cuantía sufre un incremento respecto a la previsión inicial de 8.121,83 euros.

Para entender mejor el proceso que ha llevado a liquidar la unidad de ejecución, hay que remontarse a 2004, cuando gobernaba el PP en el Ayuntamiento de la capital de la Plana. En sesión plenaria celebrada el 5 de febrero, el equipo de gobierno aprobaba el Programa de Actuación Integrada. La mercantil Urbanismo de Almazora SL resultó la adjudicataria para construir viviendas sobre suelo urbano de uso residencial. El 25 de mayo de 2006, se acordaba traspasar la concesión a Proguitec Inmobiliaria SL.

Una actuación que se enquistó en el tiempo

Con la cesión de la Unidad de Ejecución, el consistorio obtenía dos parcelas verdes (en total, 5.089,83 m²), ocho viales (sumaban 8.258,89 m²) y un solar destinado a equipamiento educativo-cultural (3.444 m²). Debido al citado Contencioso-administrativo, la urbanización se enquistó en el tiempo, lo que derivó en la caducidad del proyecto. Por otro lado, los cambios normativos obligaron a readaptar los suministros, sin estar completamente asegurados (por ejemplo, el abastecimiento eléctrico). Por si no fuera suficiente, al haber transcurrido tantos años, se debía efectuar una retasación de las parcelas, con el consiguiente aumento de tasas.

Ante la imposibilidad de seguir adelante con el proyecto, los propietarios solicitaron en 2020 la liquidación de la urbanización. Una petición, por otro lado, que el Acord de Fadrell consideró razonable, en vista de que la actuación diseñada en 2004 tampoco se ajustaba al nuevo Plan General.