CASTELLÓ. La ejecutiva que Compromís per Castelló ha celebrado este jueves ha aprobado insistir en los cambios del callejero municipal que ya proponía el grupo, un punto que ha dificultado su relación con el principal socio de gobierno, el PSPV, en las últimas semanas y que promete tensarla todavía más.
Tras celebrar la ejecutiva, la coalición nacionalista ha destacado su voluntad de "respetar y hacer valer los órganos participativos municipales", en referencia al Consell Municipal de Cultura, donde están representados los tres socios del Acord de Fadrell y "que ya avaló democráticamente los seis nuevos nombres para las calles que deben ser retirados para cumplir con la Ley de Memoria Democrática".
Esta propuesta implica renombrar las plazas Herrero Tejedor y Sánchez Gozalbo y las calles Carlos Fabra Andrés, Santos Vivanco, Cronista Revest y Traver Tomás, a los que se vincula con el franquismo, por las denominaciones en recuerdo de Isabel Clara-Simó, Empar Navarro, Beatriz Guttmann, Guillem Agulló, Padre Ricardo y Germà Colón, respectivamente. A este respecto, aunque desde el PSPV no han trasladado una propuesta alternativa concreta, se ha dejado entrever que solo hay acuerdo en los dos últimos nombres y se ha apelado al espíritu negociador entre los socios de gobierno.
Aunque este jueves, el portavoz municipal, José Luis López, no ha querido entrar a valorar la posibilidad de un enfrentamiento a la espera de la decisión de la ejecutiva de Compromís, sí ha reconocido que la propuesta definitiva se decidirá "en una reunión de los tres grupos del acuerdo de gobierno".
Es de prever que, aunque desde la ejecutiva de Compromís insisten en su "vocación de diálogo para llegar a un consenso en el gobierno local", en la reunión cada grupo defienda su postura, con Podem-EUPV como mediador entre los otros dos socios.