VALÈNCIA. Balance positivo es el que hacen las compañías en la feria internacional del azulejo de Cevisama, que se celebra esta semana en Feria Valencia. Pasado ya el ecuador del certamen de este año, deja buenas sensaciones entre los expositores en términos generales, si bien no son pocos los que coinciden en que esta edición, que es la número 40 de su historia, se ha resentido la afluencia de algunos clientes internacionales.
Con todo, las empresas que han expuesto en el certamen ven que Cevisama servirá como punto de apoyo de cara a un año que, pese a haber empezado con una tendencia negativa, en continuación del último año y medio de caída de actividad, se augura como un ejercicio de estabilización, si todo va bien. Por ello, darse a conocer y fidelizar a los clientes en este momento de incertidumbre es un elemento clave que permite la organización del evento.
"Estamos a miércoles y se está produciendo un fenómeno curioso: aquí sólo está representado un pequeño porcentaje del sector y los grandes operadores están organizando sus propios acontecimientos, por lo que quizá por eso hemos visto una mayor afluencia durante el lunes y martes", explicaba este miércoles por ejemplo el CEO de Keraben, José Luis Llacuna. A su juicio, "están viniendo todos los clientes que tenían que venir y, por lo tanto estamos contentos hasta ahora". Ahora bien, Llacuna asegura que especialmente "están viniendo muchos españoles y con buenas perspectivas para este próximo año", mientras que "el mercado de la exportación es variable".
Es una opinión en la que coinciden, en términos generales, en Roca Tiles, donde señalan que "la afluencia está siendo positiva: "Está siendo mejor que las expectativas que teníamos antes de empezar la feria", reconocen en la compañía azulejera. Así, aunque reconocen que sus "principales clientes del mercado doméstico nacional están viniendo y todavía" tienen previsión de más visitas, especialmente durante este jueves, admiten haber "notado menor afluencia de determinados mercados extranjeros que solían venir a la feria".
La sensación parece ser generalizada, también en el sector de la maquinaria, que expone en el pabellón de Cevisama Tech. La directora de marketing de Maincer, Gabriela Pereira, asegura que las expectativas de la firma en un principio eran "muy bajas". "Pero la verdad es que nos está sorprendiendo positivamente", asegura al ser preguntada sobre la afluencia en esta edición. Con todo, admite: "Es verdad que estos días, la sensación que estamos teniendo es que están viniendo muchos clientes nacionales más que internacionales".
Más allá de los pedidos que se puedan conseguir. en estas fechas, lo cierto es que las compañías valoran sobre todo la puesta en contacto con nuevos clientes y la posibilidad de fidelizar los que ya están en cartera. "Ahora ya no es como antes: el retorno de la feria ya no se puede medir según el volumen de pedidos que tengas al final de cada jornada, esto ya no funciona así", asegura Llacuna, quien reconoce que, en todo caso, "el mercado de la exportación no está muy boyante y, por tanto, es difícil medir ahora si la feria es rentable o no".
"En general, seguimos valorando Cevisama como una plataforma de lanzamiento de producto y novedades muy potente y aprovechable", subrayan también en el departamento comercial de Roca Tiles, donde opinan que "es la mejor oportunidad para presentar las nuevas colecciones que los clientes pueden introducir en sus puntos de venta durante el año". "No hay mejor forma de convencer al cliente del potencial de nuestra cerámica que enseñarle cómo lo puede implementar en su tienda", subrayan como oferta de valor de la feria, que también permite "establecer vínculos con el cliente y que siga trabajando con nosotros a lo largo del tiempo".
La celebración de la feria a principios de año también puede dar un poco de perspectiva al resto del ejercicio. Un ejercicio que, según el CEO de Keraben, "va a ser un año de parar la bajada". "No va a haber un crecimiento espectacular, pero sí va a haber una estabilización, así que podríamos hablar, en términos futbolísticos, del inicio de la remontada, pero no va a ser de un día para otro sino gradual", explica el responsable de la compañía azulejera.
En ese sentido, la feria puede servir para facilitar esa tarea de frenar la caída experimentada en el último año y medio. "El año ha empezado de forma difícil y nuestras expectativas es que sea un año muy flat (plano), así que esperamos que no sea de caída sino uniforme", reconocen en Roca Tiles. Por su parte, la responsable de marketing de Maincer mantiene "la esperanza de que este año vamos a remontar en el sector cerámico". En su caso, también trabajan en otros ámbitos y buscan la diversificación, pero a la postre, señala que "en la zona en la que estamos, la cerámica es un sector que no podemos pasar por alto".