CASTELLÓ. El Partido Popular insta a la alcaldesa Amparo Marco a explicar los criterios que está siguiendo su equipo de gobierno para anular algunas de las multas impuestas, tanto por los radares urbanos, como por las cámaras del centro, y de esta manera eximir del pago de la correspondiente multa a conductores de vehículos que no son de emergencias, sanitarios o de seguridad.
“Hasta nuestra Oficina Ciudadana ubicada en la calle Gobernador, número 2, llegan quejas de vecinos que, en primer lugar nos trasladan su malestar por las cámaras del centro y los problemas que han ido en aumento desde su entrada en funcionamiento, en detrimento de las visitas al corazón de la ciudad. Y, en segundo lugar, porque no entienden cómo algunos conductores particulares no han tenido que pagar nada después de haber sido cazados por los radares o por estas mismas cámaras y, sin embargo otros no han tenido la misma suerte teniendo que abonar la correspondiente multa. Los castellonenses merecen tener toda la información”, explica la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castelló, Begoña Carrasco.
Carrasco reitera la necesidad de apagar las cámaras del centro, “que tanto daño están causando a los establecimientos, porque ahuyentan a los potenciales clientes, con más y más obstáculos para acceder, complicando la movilidad y obligando a pasar por caja a todo aquel que acceda. Nuestro compromiso cuando el Partido Popular gobierne es dejar sin efecto este sistema abusivo que sigue esquilmando el bolsillo de los castellonenses en el peor momento de crisis. Creemos que hay sistemas alternativos a las cámaras para controlar el tráfico del centro pero sin multar”.
Por otro lado, “la prueba más evidente de que los radares tienen un único afán recaudatorio es que el gobierno municipal ni siquiera se ha molestado en elaborar antes de ponerlos en funcionamiento la lista de matrículas blancas, correspondientes a vehículos de seguridad, de emergencia o sanitarios y, por eso, se les está multando también”, apunta y matiza: “Por supuesto las normas de seguridad vial están para cumplirlas, hay que priorizar la seguridad ante todo, pero hay maneras de controlar la velocidad que no sean pasando por caja, como ya pasa con las cámaras el centro y que quieren extender al ‘Castelló Central’. Entre lo que llevan recaudado con las cámaras del centro, que suman más de 65.000 sanciones a razón de 80 euros, que suponen una recaudación potencial de 5,2 millones (si se pusieran todas las multas) y lo que llevan recaudado con los radares, más de 6.000 sanciones, a 200€ la multa sumarían 1,2 millones, este gobierno tiene dinero más que sobra para bajar impuestos, Lo que es de vergüenza es que la alcaldesa socialista Amparo Marco no renuncie a obtener una recaudación extra cuando tiene 111 millones del presupuesto por invertir en la ciudad”.