CASTELLÓN. El vicealcalde de Castellón y candidato de Compromís a la alcaldía, Ignasi Garcia, ha mostrado su apoyo sin fisuras a la edil Ali Brancal, a quien las primarias han situado en el número dos de la lista municipal. Rechaza que la investigación judicial en la que se halla inmersa pueda mermar las posibilidades electorales de la coalición. "Estoy convencido de que el día 21 la Audiencia Provincial nos dará la razón y el caso quedará en nada", ha afirmado el alcaldable.
Ese día, el alto tribunal deberá pronunciarse sobre la admisibilidad de las pruebas que el concejal del PP Juan José Pérez Macián presentó contra Brancal y contra el exvicealcalde y secretario autonómico de Empleo, Enric Nomdedéu. Se trata de sobres con supuesta propaganda electoral que presuntamente enviaron los concejales de Compromís en 2014 haciendo uso del servicio postal del Ayuntamiento.
El caso costó a Brancal el cargo de vicealcaldesa y concejala de Igualdad, Vivienda y Participación Ciudadana, en virtud del Código de Buen Gobierno que le fue aplicado por mayoría del pleno el pasado mes de diciembre. El apoyo masivo del partido que ha recibido la edil desde el primer día se ha reflejado también en las primarias celebradas este fin de semana, que la han aupado hasta el número dos de la lista municipal para las elecciones de mayo.
Garcia ha sacado pecho de su candidatura. "El hecho de ir con Brancal y Ruiz en los puestos de salida me hace especial ilusión", ha señalado el edil en referencia también a la concejala de Cultura y número tres de la lista, Verònica Ruiz. A preguntas de los periodistas en un acto celebrado en el Casino Antiguo de Castellón este lunes, se ha mostrado "convencido" de que la situación judicial de Brancal no pasará factura a Compromís en las elecciones porque confía en que la Audiencia Provincial resuelva favorablemente el recurso presentado por los investigados. "El día 21 nosotros podremos tener la cabeza bien alta y otros, no", augura el vicealcalde.
Respecto a los resultados electorales, Garcia vaticina que ningún grupo político obtendrá más de siete concejales en el Ayuntamiento, por lo que están abocados a "una política de bloques" que tendrá que sustentarse en "el diálogo" y no en "el radicalismo".
El cabeza de lista de Compromís ha avanzado que, en caso de llegar a la alcaldía, asumirá la competencia en Recursos Humanos, un área que supone un tercio del presupuesto municipal. En este sentido, ha destacado la importancia del funcionariado: "Si no tenemos gente decidida, no podemos cambiar las cosas [...], ha sido gracias a los funcionarios que hemos podido atajar las listas de espera de la dependencia".
Por otra parte, también considera fundamental si se reedita el Pacte del Grau separar la Concejalía de Urbanismo de las áreas de Movilidad y Servicios Públicos, por el volumen ingente de trabajo que gestiona este departamento. Además, considera que Educación, ahora en manos de Enric Porcar, es un área irrenunciable para Compromís en caso de revalidarse el gobierno progresista en la ciudad.
El alcaldable de la coalición ha fijado un reto de futuro para el Ejecutivo local: implementar una política tarifaria del agua, de manera que se penalice el consumo excesivo. Para ello, Garcia considera necesario que "la información fluya" entre la empresa concesionaria y el Ayuntamiento, de manera que se puedan obtener datos precisos sobre el consumo real.
Entre los objetivos que ha detallado el edil de Compromís está la apertura de una oficina de atención a la diversidad dirigida al colectivo LGTBI; la reforma en centros de salud, "tal y como se ha hecho con las escuelas"; y un plan de comunicación institucional basado en "las audiencias" de los medios de comunicación.