CASTELLÓ. La entidad financiera Cajamar ha comprado a la compañía de transportes ALSA tres nuevos vehículos adaptados a oficinas móviles itinerantes para proporcionar servicio financiero a pequeñas poblaciones de la Comunitat Valenciana que carecen de oficina bancaria, evitando así situaciones de exclusión financiera que afectan especialmente a las personas de edad avanzada que viven en estos municipios del medio rural.
Desde hace seis años Cajamar cuenta para ello con cuatro oficinas móviles que dan servicio en 24 poblaciones de entre 200 y 1.500 habitantes de Valencia, Alicante y Castellón que durante estos años han recorrido más de 400.000 kilómetros. Y para iniciar la renovación de esta flota hoy han entrado en servicio tres nuevos vehículos en virtud del contrato suscrito con la compañía de transporte ALSA, que a partir de ahora gestionará también su conducción, mantenimiento, limpieza y traslado a las poblaciones que son atendidas por Cajamar y a las que proporciona servicio financiero.
Esta nueva generación de oficinas móviles itinerantes supone un avance significativo respecto a sus predecesoras, ya que aportan un mejor aprovechamiento y distribución de los espacios interiores, al tiempo que, para su movilidad, en lo que respecta al consumo energético, son más eficientes y, en consecuencia, más sostenibles, ya que su sistema de alimentación está basado en baterías de litio a través de inversores e incorpora placas solares en la cubierta del vehículo que contribuyen asimismo a la recarga de las baterías.
Al acto de entrega y presentación de estas tres nuevas oficinas móviles han acudido Emilio Torres, director de la red Agencial de Cajamar; Valeriano Díaz, director general de la zona mediterránea de ALSA; junto a otros directivos y responsables de ambas entidades, y de Manuel Hervás, director técnico de Tecnove, la empresa que ha realizado la integración y adaptación de estos vehículos especiales a las necesidades de una oficina bancaria.
