VILA-REAL (EFE). El entrenador del Almería, Joan Francesc Ferrer 'Rubi', lamentó la derrota de su equipo ante el Villarreal (0-2) en un partido en el que admitió que estuvieron "imprecisos y torpones", cuando salían "al contragolpe" y en otras facetas del juego, y en el que fue "una pena" encajar el primer tanto en el minuto 75, "cuando más cómodos" estaban.
"Sabíamos que con el 4-4-2 el rival te quita el balón mucho rato. Hemos tenido demasiadas imprecisiones y ha sido una pena que nos marcasen ese gol en un día en el que no estás fino", indicó en rueda de prensa el preparador catalán.
El técnico del conjunto rojiblanco reconoció que tuvieron muchas pérdidas en la salida del balón y que ahí el Villarreal les "hacía daño", y abundó sobre ese aspecto: "Todo el daño ha sido más con pérdida nuestra, pero controlar a (Dani) Parejo es muy complicado".
"Lo hemos intentado, pero en el tramo en que estábamos más cómodos, con dos cambios por lesión, hemos puesto a Samú (Costa) para meter nervio en el centro del campo y no lo estábamos llevando mal del todo sin la pelota. Hemos tenido hasta cinco robos para poder salir bien, pero se nos quedaba el balón atrás", indicó.
Rubi apeló, en cualquier caso, a pasar página de esta derrota. "Tenemos que levantarnos rápido. Esto es una dura batalla y sabíamos que era complicado hacer dos partidazos seguidos, pero lo que nos ha pasado es que nos faltó frescura", argumentó, al tiempo que rechazó que el último triunfo ante el Barcelona hubiera hecho que el equipo no estuviera atento.
El entrenador del Almería recalcó que son "un equipo muy humilde", por lo que, si no trabajan "al máximo", repetir "la actuación del otro día con otro equipo así no es fácil", a lo que le unió que frente al Villarreal no estuvieron "acertados con la pelota" y les ha "costado muchísimo". "Ni un jugador ha estado fino con balón", aseveró.