CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Vila-real recupera la convocatoria de ayudas a la cooperación al desarrollo después del impasse por la pandemia. El presupuesto de este año incrementa la dotación prevista para las organizaciones sin ánimo de lucro que trabajan en países en vías de desarrollo, de manera que Vila-real destinará el 0,8% a la cooperación, con una partida de 270.000 euros. A ello se une el refuerzo de personal para agilizar la tramitación de estas ayudas -que en las anteriores convocatorias se ha visto ralentizada por problemas administrativos- y el aumento de la aportación al Fons Valencià per la Solidaritat, que contará con una oficina propia en la ciudad.
“Somos conscientes de los inconvenientes que han tenido las ONG debido al retraso en el pago de las justificaciones de las últimas convocatorias de ayudas a la cooperación al desarrollo y por ello pedimos de nuevo disculpas”, ha reiterado el alcalde, José Benlloch, quien ha confirmado que en estos días ha estado firmando pagos pendientes y que desde la Concejalía de Solidaridad, Cooperación e Integración que dirige el edil Álvaro Escorihuela se trabaja para dar respuesta cuanto antes a los expedientes que aún están pendientes por resolver. En este sentido, el alcalde ha recordado que los retrasos en el pago de ayudas se deben a problemas administrativos “por la dificultad de justificar el destino de las aportaciones, teniendo en cuenta que estamos hablando de proyectos que se llevan a cabo en otros países, que utilizan diferentes monedas, con la complicación burocrática que esto supone”.
Precisamente para poner solución a esta problemática, el primer edil ha apostado por reforzar el área de cooperación, creando una concejalía propia y con una gestión independiente de Servicios Sociales, “ya que este departamento está en un momento de sobreesfuerzo por la gestión de la pandemia y por la aplicación de la nueva Ley de Servicios Sociales Inclusivos de la Comunitat Valenciana y la implantación del contrato programa”.
Al respecto, el presupuesto de 2022 contempla la creación de una plaza de técnico de gestión específico para el área de cooperación con lo que el equipo de gobierno prevé que se pueda agilizar la tramitación y justificación de las ayudas a las ONG. Asimismo, el Ayuntamiento incrementa la aportación al Fons Valencià per la Solidaritat -que pasa de 30.000 a 40.000 euros- una entidad que además preside el concejal Álvaro Escorihuela, y que contará con una oficina en la ciudad.
“El Gobierno central ha anunciado la nueva Ley de Cooperación para el Desarrollo Sostenible y la Solidaridad Global, que marca como objetivo central que las administraciones destinen el 0,7% a la cooperación en 2030, en la línea de los Objetivos de Desarrollo Sostenible; nosotros vamos un paso por delante y este año destinaremos ya cerca del 0,8%”, concluye el alcalde.
Tras meses intensos de campañas políticas y elecciones locales, autonómicas y generales ahora toca reposar lo vivido y elegido. Con la perspectiva del tiempo veremos y analizaremos si los nuevos gobiernos priorizan la defensa de los derechos humanos, de los derechos sociales y de la cooperación internacional en sus mandatos.
