CASTELLÓ. El Ayuntamiento de Castelló espera que la Conselleria de Sanidad autorice a los feriantes a montar atracciones en el PAU Gumbau a partir de la semana que viene. Según asegura el concejal de Actividades, Jorge Ribes, "a día de hoy, si no lo es, el permiso será oficial en las próximas horas y efectivamente en principio será positivo". El sector lleva varias semanas pendiente de la decisión de la administración autonómica, que valora desde el 14 de octubre una segunda solicitud tras rechazar la primera al entender que el protocolo ante la covid-19 resultaba incompleto.
En las últimas semanas el colectivo ha ido incorporando nuevas medidas de prevención, siguiendo las instrucciones de la propia Conselleria. La más importante se refiere a establecer un control de acceso para vigilar el aforo del recinto, lo que implica recoger en un listado el nombre y apellidos de cada asistente. Otras mejoras respecto a la primera petición corresponden a la mayor frecuencia sobre la desinfección de las infraestructuras y casetas, así como la instalación de mesas y sillas en los puestos de alimentación, especialmente churrerías.
Debido a que transcurrirán más de 15 días para la posible apertura de la feria desde la fecha inicialmente prevista (el 16 de octubre), los empresarios apuestan por permanecer en la capital de la Plana hasta Reyes, el 6 de enero. El presidente de la asociación, Antonio García, cree que así se compensaría la pérdida económica de estas semanas. Además, en el supuesto de que Sanidad acceda este viernes o el lunes a que se monten las atracciones, no será posible iniciar la actividad como pronto hasta el 6 de noviembre.
El montaje de todas las infraestructuras requiere de tiempo. Por otro lado, no solo resulta preceptiva la aquiescencia de la Conselleria. El Ayuntamiento igualmente debe aprobar el uso del recinto, reactivando servicios como la luz y el agua, lo que implica papeleo administrativo, que no se resuelve de un día para otro. De ahí que los feriantes planteen la posibilidad alargar la autorización hasta todo el mes de diciembre.
A pesar de las dificultades que atraviesa el gremio, Garcia garantiza la presencia del mismo número de atracciones que habitualmente se instalaban en Castelló en Magdalena o Todos los Santos. Así, el número de puestos oscilaría entre los 70 y 80. A la noria, el tren de la bruja o tiovivos, les acompañarían tómbolas, autos de choque, el pasaje del terror y la rana saltarina, entre otros. "Es verdad que algunos tendrían que irse durante las últimas semanas al tener compromisos en otras ciudades, pero la mayoría seguiríamos aquí", sostiene.
El presidente de la asociación insiste en denunciar el desamparo de un sector muy golpeado por la pandemia y que permanece completamente parado desde marzo, cuando el Gobierno decretó por primera vez el estado de alarma. Desde entonces, los feriantes no han logrado levantar la cabeza ante la imposibilidad de desempeñar su profesión.