Peñíscola no renuncia al carácter internacional de su Festival de Jazz y suma más conciertos

CASTELLÓ. Parece ser que el Festival Internacional de Jazz de Peñíscola será de las pocas citas culturales que podrán contar este verano en su cartel con la presencia de artistas que residan fuera de España. Solo será uno de los seis conciertos preparados, pero la edición de este año puede decir que, pese a la crisis de la Covid-19, disfrutará de la visita del saxofonista estadounidense Scott Hamilton, quien ha podido mantener su actuación en la ciudad gracias a vivir actualmente en Italia. Pero este no es el único de sus logros, además de esto, la cita musical pasa a estar compuesta por seis conciertos, a diferencia de los cuatro que se ofrecían hasta ahora. Así lo han hecho saber durante la presentación oficial del programa, la directora adjunta de Música y Cultura Popular del IVC, Marga Landete, y el delegado territorial del IVC en Castelló, Alfonso Ribes, quien ha destacado que pese a "todo lo que se ha sufrido" por sacar adelante el trabajo a ciegas, se ha conseguido diseñar una edición "muy correcta y de calidad".

En su caso, el Festival de Jazz de Peñíscola apostará de lleno por los conciertos presenciales, por lo que no ofrecerá contenido por la red. Los responsables del IVC creen que es momento de dejar de un lado la cultura del streaming para "dinamizar" teatros, auditorios o incluso la misma calle. "Pensamos que no tendría sentido que la gente se encierre en sus casas en pleno mes de julio. Para el festival Serenates sí preparamos una programación en YouTube, porque por tiempo era la única opción. Pero aunque está funcionando bastante bien, sabemos que los conciertos de julio seguramente ya no les verá apenas nadie. Otra cosa es que nosotros como plan B, si hay un rebrote, optemos por hacer retransmisiones. Lo importante es que la programación se mantenga sí o sí, pero personalmente creo que no es el mensaje correcto mantener la cultura como algo gratuito", ha asegurado Landete. En esa línea, el director territorial del IVC considera que "ya no es el momento" de mantener actividades online y ha destacado las "ganas" que tiene el propio público por vivir la cultura en directo. Así, asegura que en la despedida del Principal de Castelló se colgó el cartel de 'no quedan localizaciones', con lo que se logró reunir a 240 personas. 

El Festival de Jazz de Peñíscola vivirá además este año otros cambios. Y es que la nueva entrega del evento concentrará por primera vez todos los conciertos en una semana, del 24 de julio al 1 de agosto, como hacen habitualmente otras ciudades con tradición en el género como San Sebastián. Los organizadores han apostado por esta fórmula para reagrupar así en diferentes semanas todas sus citas. De este modo, dos días después de concluirse su 17ª edición, se dará paso al Festival de Música Antigua y Barroca de Peñíscola, que se celebrará entre el 3 y el 12 de agosto en el Castillo del Papa Luna. 

Como destaca Landete, el focalizar todas las actividades de la semana en una misma propuesta cultural, junto al hecho de que este verano no haya una agenda tan colmada de eventos, puede servir de gran ayuda para que el festival consiga llegar a más gente. Especialmente, a un público local. "Todos los años recibimos más turistas que gente de la zona, principalmente porque al ser temporada alta, los vecinos de Peñíscola están trabajando. Pero, puede ser verdad que la de este año sea una oportunidad para atraer a nuevas personas. Sobre todo porque hay ganas de música en directo y de contacto con los artistas. Fui hace dos semanas a un directo en una sala de València y esto se nota", ha contado la directora adjunta, quien también considera que estos proyectos han de servir urgentemente como un impulso para el sector.

"Es difícil calcular el impacto que ha tenido la crisis sanitaria en los músicos valencianos, porque no solo es que se cancelase un bolo en una fecha exacta, es que en muchas ocasiones las actuaciones ni se llegaron a cerrar. Por eso, a través del plan 'reaCtivem', trataremos de programar a la mayor cantidad de bandas profesionales y, principalmente, a las que hayan sufrido más el golpe", ha expresado para concluir Marga Landete.

Jazz, flamenco y mucho mestizaje

Esta nueva entrega del Festival de Jazz de Peñíscola contará, como hemos dicho, con presencia internacional, pero serán los artistas valencianos los que reforzarán su celebración. Desde l'Alcora, la Jove Dixieland Jazz Band alzará el telón, el 24 de julio a las 20h, con un pasacalles basado en "la diversión ruidosa, la fiesta y la fuerza característica de la música tradicional de Nueva Orleans". El espectáculo seguirá un recorrido que finalizará en el Palacio de Congresos, sede de todos los conciertos. Una vez allí, la primera actuación que discurrirá será la de Scott Hamilton, quien está considerado en la actualidad como uno de los mejores saxofonistas de jazz. El estadounidense, que actuará el mismo día, cuenta en su vasto currículum con más de una treintena de discos, grabados como voz principal, y otros tantos en los que ha colaborado junto a otros músicos. En esta ocasión, el artista se subirá al escenario junto a la pianista y cantante Dena Derose, el batería Jo Krause y el contrabajo Ignasi González. 

Dos días después se recuperará el tono valenciano con el concierto Film Sessions, a cargo de David Pastor, quien recibió el premio a Mejor Disco de Jazz en los últimos Premios Carlos Santos de la Música Valenciana. Para su visita a Peñíscola, el trompetista transformará las bandas sonoras de films como Chinatown, Desayuno con diamantes, Orfeo negro o Fiebre del sábado noche, en un directo en el que le acompañarán Francesc Capella, Tom Warburton y Anton Jarl. Pero quien dará un giro al festival será Dorantes con su actuación el 27 de julio. El pianista sabe cómo elevar a través de sus piezas el flamenco más ortodoxo para fusionarlo con el jazz y otros géneros. Así lleva el autor más de 20 años actualizando y versionando temas que, por una razón u otra, han marcado su carrera. 

Con todo, el mestizaje de estilos irá un poco más allá el 28 de julio con Pátax, según la organización, la banda de fusión "más prominente del estado que ha conquistado escenarios por todo el mundo". Como poco la suya será la actuación más multitudinaria con hasta ocho músicos encima del escenario, entre ellos la bailarina castellonense Lidón Patiño. En su paso por Peñíscola, Pátax presentará un espectáculo donde se fusiona el flamenco con la música del caribe, el funk, el soul y el jazz. Por último, será la también castellonense Bárbara Breva quien clausure el festival con su música el sábado 1 de agosto. 

La jornada de inauguración del festival será totalmente gratuita y los demás conciertos tendrán un precio de 10 euros. Los espectáculos empezarán a las 23.00 horas salvo el día de la inauguración, que será a las 20.00 horas.