CESM se enroca en la huelga y el resto de sindicatos seguirá negociando con Sanidad el miércoles

CASTELLÓ. Las negociaciones entre la Conselleria de Sanidad y los sindicatos siguen, tras la última Mesa Sectorial, sin avances significativos. Y es que la tensión por la cercanía de la huelga y la evidente tirantez entre el sindicato médico CESM y el departamento que dirige el conseller Miguel Mínguez tras las últimas disputas ha imposibilitado que en la reunión de este viernes se pudiera alanzar un acuerdo común. Eso sí, la Conselleria de Sanidad se ha comprometido con los sindicatos a fijar un nuevo calendario negociador una vez pase la huelga de este lunes, y les ha emplazado a nuevas mesas sectoriales los próximos días 8 y 10 de marzo para continuar negociando.

Según apuntan fuentes sindicales, la tirantez en el ambiente por las últimas disputas entre el sindicato médico y la Conselleria de Sanidad no ha dejado fluir el ritmo normal de la mesa negociadora. Esto ha provocado que el resto de sindicatos de la mesa -CCOO, Satse, CSIF, UGT e Intersindical- arremetan contra el sindicato de facultativos, acusándoles de bloquear las negociaciones. 

"La total negativa a negociar demostrada por CEMSCV-SAE ha impedido que en el día de hoy se hayan alcanzado acuerdos que son imprescindibles y necesarios para la defensa y el fortalecimiento de la Sanidad Pública y que hubiesen contribuido a mejorar la calidad asistencial y las condiciones laborales del personal desde hoy mismo, como por ejemplo la jornada de 35 horas y mejoras en la Atención Primaria. De haberse producido hoy el acuerdo, habría sido complicado explicar el mantenimiento de la convocatoria de huelga", han señalado en un comunicado.

Por su parte, el vicesecretario general del CEMS-CV Jesús Gil, al término de la reunión, ha calificado esta Mesa Sectorial como "una trampa para intentar desactivar nuestra huelga". En ese sentido, ha lamentado que CCOO, UGT y CSIF les hayan acusado de "condicionar la negociación" cuando, ha recalcado, lo que "no queremos es que se conculquen nuestros derechos". Gil ha explicado que algunos de los puntos son comunes a todos los profesionales sanitarios, como la reducción de la jornada laboral de 35 horas, pero que otros afectan exclusivamente a los médicos, como la negociación del número de guardias que pueden realizar al mes o marcar un tope de pacientes en sus agendas.

Las mejoras que promete Sanidad

Este diario ha podido tener acceso al documento que detalla las mejoras de la asistencia sanitaria y las condiciones laborales de los profesionales sanitarios a las que se compromete Sanidad y sobre el que se negociará a partir de la próxima semana. Tal y como recoge el documento, Sanidad se compromete a implantar la jornada laboral de 35 horas semanales en horario ordinario. Esta implantación se llevará a cabo de forma progresiva, de acuerdo con las limitaciones establecidas en la Ley de Prepuestos Generales del Estado y de forma homogénea en todos los niveles asistenciales. La propuesta es que se reduzca progresivamente para que la implantación de la jornada de 35 horas sea completamente efectiva el 1 de enero de 2026.

En cuanto a las mejoras relativas a la Atención Continuada, la Conselleria de Sanidad se compromete a aumentar el importe de la hora de guardia al importe medio de las comunidades colindantes y las comunidades más pobladas siendo ésta de 27,14 euros los días laborables y 29,54 los festivos y su incremento proporcional para enfermería. A partir de la cuarta guardia inclusive se incrementará en un 10% el valor de la hora de guardia.

Por lo que respecta a los módulos de sustitución y refuerzo, se ofrecerán módulos de sustitución en todos los ámbitos hasta que la sustitución resulte efectiva. Los módulos tendrán una duración equivalente al turno sustituido o a la parte proporcional del trabajo asistencial de la jornada y la participación será voluntaria. Los módulos de refuerzo para 2023 permitirá ofrecer módulos para contener la demora, la realización de programas específicos (ecografías, cirugía menor, lectura de retinografías, etc.), mitigar el incremento de la actividad sobrevenido y la gestión de consultas no demorables.

Sanidad se compromete además a elaborar el estudio de la brecha salarial adquirida históricamente, con participación sindical y en el marco del Plan de Igualdad para su posterior corrección. Asimismo, el documento recoge otros puntos como la mejora de la seguridad en los centros sanitarios, garantizar la formación continuada necesaria a los profesionales o medidas específicas para la Atención Primaria. En concreto, estas medidas limitan las citas en las agendas de medicina de familia y pediatría en la Atención Primaria y también fijan un límite en el cupo medio de tarjetas sanitarias, entre otros puntos.