CASTELLÓ (EP). El Instituto de Tecnología Cerámica (ITC-AICE) ha celebrado una reunión de seguimiento del proyecto europeo Life Replay, financiado por la Comisión Europea a través del programa LIFE, en la que se ha comunicado que en el marco de este proyecto se ha obtenido una primera tinta cerámica a partir de los residuos tratados con un prototipo de separación, construido por la empresa Neptury Technologies, miembro del consorcio. Se trata de una tinta negra, adecuada para la impresión digital, o inkjet, de baldosas cerámicas.
En esta reunión se han estudiado los avances ya que todavía se está afinando y poniendo a punto el prototipo de separación de los residuos de tintas cerámicas inkjet a fin de optimizar el proceso para garantizar la calidad de los elementos separados, cuyo uso se destinará a la fabricación de nuevos productos cerámicos más respetuosos con el medioambiente.
De este modo, Life Replay da una nueva vida a las tintas cerámicas, alineándose con los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU, ODS 9: Industria, Innovación e Infraestructuras, 12: Producción y Consumo Responsables y 13: Acción por el Clima.
Life Replay es un proyecto orientado a lograr que los residuos de tintas cerámicas de inyección pueden reintroducirse en el proceso industrial cerámico mediante un procedimiento de separación específico que cumpla los requisitos industriales. El fomento de la sostenibilidad y, por tanto, la minimización de los costes de eliminación de residuos son sus principales objetivos.
Además, dados los elevados costes que presentan actualmente las materias primas cerámicas, Life Replay pretende conseguir separar dos tipos de componentes: por un lado, los compuestos sólidos basados en metales pesados, y por otro, los solventes orgánicos. Ambos se reintroducirán en el proceso de producción de baldosas cerámicas, tintas inkjet y calcinación de pigmentos.
Esta propuesta también demostrará la viabilidad de utilizar los residuos de tinta de inyección como nuevas materias primas para la industria cerámica, transformándolos en una fuente alternativa de pigmento y disolvente, que, además de ser respetuosa con el medio ambiente, resulte rentable económicamente.