CASTELLÓ. La obra del Corredor Mediterráneo entre Castelló y Tarragona se acerca. Después de que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) adjudicase los trabajos propiamente dichos hace medio año, el Consejo de Ministros le ha autorizado este martes a licitar el contrato para el suministro y transporte de los cambiadores de vía. Así, Adif sacará próximamente a concurso este contrato por 23,4 millones de euros (sin IVA).
Este es uno de los contratos que se suelen adjudicar en el último momento antes de que arranquen las obras, ya que la instalación de los aparatos de vía se realiza una vez ya se han ejecutado otras muchas labores y, mientras tanto, se fabrican estos cambiadores. Así, en los últimos meses Adif también ha adjudicado el contrato para la ejecución de las instalaciones de comunicación y seguridad, que se verá complementado con el de los elementos de seguridad propiamente dichos, también adjudicado ya.
Es precisamente el primero de estos dos contratos el que da una idea de cuándo puede acabar de materializarse el ancho internacional entre Castelló y Tarragona: no será al menos hasta 2024.
Entre los dos tramos en que se dividen (Castelló-Vinaròs y Vinaròs-Vandellós), las obras comprenden el cambio de ancho de vía en un trazado ferroviario de 150 kilómetros de longitud. Además, los trabajos incluyen las operaciones necesarias en plataforma, superestructura y electrificación, incluida la mencionada seguridad.
Por otra parte, el Consejo de Ministros también ha autorizado otras obras en el Corredor. En concreto, permite que Adif licite las obras de electrificación de la vía de ancho estándar en el tramo Xàtiva-Nudo de La Encina. El contrato tiene un valor estimado de 19,5 millones de euros (sin IVA) y un plazo de ejecución de dos años.