López avisa sobre las listas del PSPV al Congreso y Senado: "De aquí al sábado puede pasar de todo"

CASTELLÓ. "De aquí al sábado puede pasar de todo". El secretario de organización del PSPV de Castelló, José Luis López, deja abierta la posibilidad de retoques de última hora en las listas al Congreso y al Senado, aprobadas por el Comité Provincial este miércoles y ratificadas por País un día después. El barón socialista recuerda que, como ocurrió con la candidatura municipal, solo la Ejecutiva Federal tiene la potestad de blindar las relaciones de nombres, por lo que insiste en la hipótesis de que se produzca alguna sorpresa este sábado, cuando está previsto que los máximos órganos nacionales validen los listados de los distintos territorios con vistas al 23J.

En las relaciones de candidatos propuesta por la dirección socialista que lidera el secretario general, Samuel Falomir, llama la atención las ausencias del parlamentario nacional Germán Renau y la alcaldesa en funciones, Amparo Marco, a los que la agrupación de la capital de la Plana había incluido entre sus preferencias para la Cámara Baja y Alta, respectivamente. López subraya que, a pesar de la decisión tomada por la Provincial y la Nacional (País), "hay que esperar. Hasta que no terminen todos los trámites las candidaturas continúan" su curso.

Ros y Redondo, las dos apuestas

Las listas están encabezadas por dos afiliadas del colectivo de la capital de la Plana. Por un lado, Susana Ros repite puesto al Congreso en relación a las últimas generales celebradas en 2019. Por otro, Eva Redondo, delegada del Consell desde abril de 2021, se estrena para el Senado. La primera cuenta con el apoyo de Ferraz, especialmente del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con el que mantiene amistad desde hace años. La segunda se trata de una apuesta personal del jefe del Ejecutivo valenciano, Ximo Puig.

La resolución definitiva a propósito de esas candidaturas no es el único frente que el PSPV de Castelló tiene abierto en las últimas semanas. En paralelo al procedimiento orgánico, los socialistas trabajan en el diseño de su nuevo grupo municipal. López, número dos de la lista, evita pronunciarse sobre el reparto de competencias. "El 17 se conforma la nueva corporación. A partir de esa toma de posesión, hablaremos entre nosotros", se limita a señalar.

"La ciudadanía ha decidido que gobiernen el PP y Vox"

El altavoz del Acord de Fadrell en funciones ni confirma ni desmiente que el Partido Socialista vaya a postular su propio candidato a la Alcaldía en la investidura. Lo único que corrobora es que "no vamos a apoyar a Begoña Carrasco", en referencia a la candidata popular y futura alcaldesa de Castelló. "La ciudadanía ha decidido que deben gobernar el PP y Vox. Una vez se constituya la corporación, decidiremos la estrategia en la oposición". Asimismo, se analizará el ofrecimiento de la principal fuerza de la derecha para sentarse a negociar y estudiar posibles "grandes acuerdos".

La eventualidad de que los 27 concejales deban elegir entre varios aspirantes resulta completamente inusual en el Ayuntamiento de Castelló. Desde que existe la democracia, tanto en los gobiernos de coalición como aquellos de un único color nunca ha habido más de un pretendiente al sillón de alcaldesa (o alcalde). En función de cómo evolucionen en los próximos días las posibles conversaciones del PP con la formación de extrema derecha y Compromís, no se descarta que incluso haya hasta cuatro nombres diferentes para votar. Además del conocido de Carrasco, podrían irrumpir el mentado López, por el PSPV; Ignasi Garcia, por Compromís; y Antonio Ortolá, por la fuerza que lidera Santiago Abascal a nivel nacional.

Precisamente este viernes el PP y Vox piensan mantener un primer encuentro en busca de sentar las bases de una alianza de gobernanza. Ante el apremio por sellar esa unión, es posible que la negociación sobre la letra pequeña se aborde a partir del 18 de junio. El partido de extrema derecha persiste en su idea de reducir el número de concejalías y asumir las competencias con mayor contenido ideológico. Ambas condiciones, sobre todo la segunda, consideran que son casi innegociables.