CASTELLÓ. El Partido Popular de la provincia de Castellón ha exigido este miércoles al Gobierno de España la ejecución de la ampliación del embalse de Arenós adjudicada en 2022 y que Pedro Sánchez ha decidido vetar negando al territorio una inversión “crucial frente a la sequía”.
Así lo ha considerado el secretario general del PPCS, Salvador Aguilella, después de advertir de la suspensión formal de esta obra, comunicada por la propia Confederación Hidrográfica del Júcar a los regantes la pasada semana, y que conlleva la anulación de un proyecto adjudicado el 1 de mayo de 2022 por un importe de 9.708.260,64 euros para ampliar hasta 100 hm³ la capacidad de la presa.
El proyecto pretendía reparar el aliviadero de la presa en el marco de la primera fase de la adecuación del embalse y ampliar su capacidad de almacenaje al alcanzar una cota de 595 metros sobre le nivel del mar frente a los 592,9 actuales. Un proyecto que “ahora el PSOE decide suspender generando un gran daño a nuestra provincia que en algunos territorios ya se encuentra en situación de emergencia por sequía”.
Desde el Partido Popular, tal y como considera Aguilella, “vamos a ejercer toda las acciones que estén en nuestra mano para evitar que el Gobierno de España nos niegue esta mejora que es vital para la provincia”. “No queremos más castigos, queremos más inversiones”, ha manifestado Aguilella.
Y el veto a esta obra constituye un varapalo contra los agricultores “que no podemos permitir”. En efecto, la presa de Arenós regula los caudales de la cabecera del río Mijares, entre ellos el pantano del Sichar, actualmente bajo mínimos. Es la infraestructura que posibilita el regadío a más de 30.000 hectáreas de la Plana de Castellón y ejerce de apoyo al suministro de agua potable de la población y de forma indirecta protege poblaciones ribereñas contra avenidas y permite el mantenimiento de caudales ecológicos.
“El territorio está cada vez más agotado y el agua que almacenan nuestros pantanos es fundamental para poder seguir adelante”, advierte Aguilella. “Sobre todo en un año en el que las lluvias escasean y las reservas de agua de la provincia de Castellón se encuentran en un estado de alarma por la baja acumulación de este preciado bien”. Un escenario en el que “lo último que necesitamos son más castigos. Lo que exigimos son más ayudas”.
Cabe señalar que los embalses que nutren el territorio de la provincia de Castellón registran 63 hectómetros cúbicos, lo que representa un 28% de la capacidad total que podrían llegar a almacenar, que asciende a los 221 hectómetros cúbicos. De ellos, de ejecutarse esta obra, 100 hm³ corresponderían a Arenós que ahora, con el castigo del Gobierno de Pedro Sánchez, pierde la oportunidad de ampliar su capacidad con el consiguiente maltrato a la agricultura de la provincia. “No lo vamos a permitir”, ha manifestado Aguilella.